La prima supera ya los 610 puntos

Si la economía española no se va a recuperar ni siquiera en 2013, como pronostica el nuevo cuadro macro-económico; si las Comunidades Autónomas ya han comenzado a pedir su particular ayuda financiera al Estado; y si el recién aprobado rescate bancario no hace más que aportar dudas sobre la viabilidad del sector financiero de España, no es de extrañar que los inversores hayan optado por replegar posiciones en los parqués de forma abrumadora. En apenas unas horas, el Ibex-35 se ha retrotraído a 2010, exactamente a mediados de mayo de ese ejercicio, cuando la Unión Europea estuvo a punto de intervenir España. La de hoy ha sido la peor jornada del selectivo no sólo en 2012 ni en 2011, sino desde aquél fatídico día: un 5,82% ha cedido en esta jornada; un 6,25% en esta semana; y más de un 27% en lo que va de año.

El coste de la deuda española ha afectado directamente al selectivo, y en especial a los grandes valores. Con un interés del bono español tan elevado (ya roza el 7,26% y la prima de riesgo alcanza el máximo de los 612 puntos básicos, aunque cierra en los 609), además del propio Estado, las empresas españolas son las más perjudicadas, porque no encuentran financiación en los mercados internacionales. Sólo una respuesta del Banco Central Europeo (BCE) parece ser la única opción para resolver esta situación que no se puede mantener durante muchas más jornadas.

Por su parte, los mercados europeos tampoco han tenido una buena evolución en esta última jornada de la semana, pero las caídas han sido más moderadas que en el caso español. Así, el Eurostoxx-50 ha cedido un 2,83%, mientras que el CAC parisino se ha dejado un 2,14%; el DAX alemán ha perdido un 1,90%; y el FTSE londinense se ha depreciado un 1,09%. El euro también ha sufrido en su cotización las dudas en torno a la economía europea, y ha caído hasta los 1,21 dólares en su cambio con la divisa norteamericana. Por su parte, el barril de Brent alcanza ya los 106 dólares.

No ha habido ni un solo valor del Ibex-35 que haya conseguido arrancar algunos enteros durante la jornada. De hecho, el selectivo se ha dejado más terreno de lo normal por el efecto de los “blue chips”, los valores con más peso en el índice. Sólo las acciones de Telefónica han retrocedido un 7,44% y han abandonado definitivamente el soporte de los 10 euros. También han caído con fuerza los títulos de BBVA (-7,80%) y Santander (-7,32%). Por su parte, Iberdrola se ha dejado un 6,97% y, en el caso de Repsol, que acumulaba plusvalías durante toda la semana, finalmente ha cedido más de un 3%. Sólo con la evolución de estos cinco valores, el descalabro del Ibex-35 estaba casi garantizado.

Wall Street amplió también sus pérdidas en la recta final de la jornada y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, cerró con un descenso del 0,93 %, afectado por las nuevas preocupaciones sobre la crisis de deuda europea, que pesaron más que los positivos resultados difundidos en EEUU.

Además de la evolución de los grandes títulos, debemos tener en cuenta la volatilidad con la que se han movido los valores bancarios: Popular ha caído un 7,95%, Bankinter un 7,20%, Sabadell un 6,96% y Caixabank un 3,61%. Pero el protagonista ha vuelto a ser Bankia. Después de acumular un avance superior al 28% en las dos sesiones anteriores, este viernes ha caído un 10,43%. El precio de su acción vuelve a aproximarse al precipicio de los 60 céntimos por título.

Entre los valores que más terreno se dejan, se encuentra constructoras como FCC (-9,23%), Sacyr-Vallehermoso (-8,36%) y ACS (-8,32%), además de Gamesa (-8,84%). Por su parte, las compañías que menos terreno han perdido en esta jornada han sido Grifols (-0,94%), REC (-2,09%) y Técnicas Reunidas (-2,32%).

En el Mercado Continuo, los registros no han sido mucho mejores. Banco Valencia (9,52%), EADS (5,88%) y Antena 3 (1,98%) han sido los mejores valores, mientras que Natracéutica (-11,18%), San José (-10,92%) y Solaria (-10,43%) son los farolillos rojos.