«Las imágenes del dedo son un castigo para los dos»

El Barça 2012-2013 ya está en marcha y con él su nuevo entrenador, Tito Vilanova, que ayer se estrenó en la sala de prensa como máximo responsable del banquillo azulgrana. El hasta hace bien poco ayudante de Pep Guardiola no se mordió la lengua y, como su exjefe, no eludió ningún asunto. Ni siquiera cuando se le preguntó por José Mourinho y el día que éste le metió el dedo en el ojo. Ambos fueron sancionados (Tito repelió la agresión) y los dos fueron también indultados por obra y gracia del presidente de la Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar.

«El castigo no está en poner un partido o dos, sino que la gente podrá ver las imágenes dentro de muchos años y difícilmente se olvidarán. Este es un castigo para los dos», afirmó Vilanova, que se mostró algo molesto por que siempre se le recuerde el mismo tema. «Me cansa que después de un año todavía hablemos de ello», expresó. A pesar del enfrentamiento que tuvieron sobre el campo justo hace un año en la vuelta de la Supercopa, el nuevo inquilino del banquillo azulgrana negó que su afinidad con 'Mou' sea mala. «Ya me saludó, no tengo una mala relación con él», señaló.

Y por supuesto en el día de su estreno, Tito también habló de lo que más le gusta, de fútbol. Reflexionó sobre las ausencias de Keita (se ha ido a la liga de China) y Abidal (operado de cáncer), que a su juicio son más que dos bajas, porque entre los dos podían ocupar cuatro posiciones distintas. «Si tenemos la posibilidad de fichar a un jugador de pivote y central (podría ser el navarro Javi Martínez), perfecto, pero si no, tiraremos de la gente que tenemos en el fútbol base, que son buenos, muy buenos. No podemos olvidar que la plantilla que tenemos es buenísima», dijo. Pensaba sobre todo en Messi, que por primera vez en tres años hará la pretemporada entera con su equipo, después de firmar una temporada en la que hizo la friolera de 73 goles (50 en liga).