Consumir alimentos crudos, garantía de salud
El consumo habitual de alimentos crudos favorece la digestión, el control de la glucemia y del peso, retrasa el envejecimiento y aumenta la vitalidad
Actualizado:Ensaladas, fruta fresca, frutos secos y frutas desecadas son alimentos que se consumen mucho más en verano que en invierno. Con la llegada del calor solemos elaborar menos platos calientes y nos decantamos mucho más por opciones como el gazpacho, la ensalada de pasta y alimentos crudos recien sacados de la nevera.
El verano es el momento ideal para cuidar el cuerpo y la salud ingiriendo frutas y verduras de la estación, porque poseen un alto contenido de agua, fibra, vitaminas y nutrientes, que son geniales para satisfacer el hambre y la ansiedad.
Este habito es bastante saludable, sobre todo si los tomamos crudos, ya que aumentar el consumo de alimentos crudos en nuestra dieta ayuda a prevenir enfermedades, mejora la digestión, retrasa el envejecimiento y aporta mayor vitalidad e hidratación.
Las molestias típicas de comidas pesadas, como los gases, la hinchazón abdominal, las flatulencias etc., desaparecen cuando consumimos mayor número de alimentos crudos. Esto se debe en gran parte a que al estar crudos son más ricos en nutrientes reguladores y antioxidantes.
Ya que para muchos en esta época del año los alimentos que llegan al mercado suelen demostrar su máxima expresión de sabor y color, hay que aprovechar para consumirlos crudos en recetas fáciles de elaborar y muy digestivas.