El PP andaluz afronta el relevo de Arenas bajo la sombra de los recortes de Rajoy
El congreso que aupará a Zoido a la presidencia del partido empieza hoy en Granada
Actualizado:El PP andaluz afronta desde hoy en Granada un congreso trascendental en su historia, el del relevo de Javier Arenas. La sucesión del carismático líder se produce en un momento difícil para el partido en el Gobierno por los últimos recortes que Rajoy ha anunciado esta semana, los mayores en la historia de España. La consigna para los más de 1.494 compromisarios es la de defender a toda costa las reformas de Rajoy, según manifestó ayer Ricardo Tarno, organizador como vicesecretario del cónclave.
Lo habitual en los últimos congresos y convenciones del PP era que estos se desarrollaran en un ambiente de euforia. En este clima se celebró incluso el del pasado febrero, cuando Rajoy consolidó su liderazgo después de alcanzar la Moncloa, pese a que ya había anunciado que venían tiempos de recortes. Andalucía era el último territorio por conquistar y estaba al alcance según las encuestas. Nada hacía pensar entonces a Javier Arenas que no lograría la presidencia de la Junta y que seis meses después estaría haciendo las maletas para un destino que solo él conoce.
La frustración de no gobernar en Andalucía será otro fantasma que pulule por el palacio de congresos y ferias de Granada, pese a que el PP afronta esta cita con las mejores cifras de su existencia. Zoido no se cansa de repetirlas para insuflar ánimo entre los populares andaluces: 2.100 concejales, 33 diputados nacionales, 26 senadores, gobiernos en cinco diputaciones provinciales, alcaldías en las ocho capitales andaluzas, más de 265 municipios y convertir al PP en partido hegemónico tras ganar por primera vez en Andalucía las elecciones municipales, generales y autonómicas. Pese a ello, Zoido no deja de recalcar: «Hay que ir a Granada para tomar impulso para gobernar», en referencia a la Junta.
El PP andaluz tendrá también el reto de demostrar que no hay heridas por la sucesión de Arenas. La primera entre este y la número dos de Rajoy. Dolores de Cospedal inaugura esta tarde el congreso. Mucho se ha hablado sobre su rivalidad con Javier Arenas, pugna incluso en el nombre de quién tomará las riendas del partido en Andalucía. Finalmente Zoido queda como que es cosa de los dos y ha sido bendecido por Rajoy.
Templar ánimos
La pelea interna de los socialistas en Almería cuando Griñán vaticinaba un congreso sin sobresaltos, le sirve a Zoido para guardar cautela por aquello de las barbas del vecino. No se arriesga al vaticinio de un congreso a la búlgara, pero cabe prever que las llamadas al orden de Rajoy hagan que las críticas, si las hay, no afloren en votos. Zoido ha tenido que templar ánimos por el sevillanismo de la nueva cúpula, sobre todo por su voluntad de llevar de número dos al presidente provincial de Sevilla, José Luis Sanz. Como contrapeso colocará a Elías Bendodo como presidente del comité de gobiernos locales, el de mayor peso junto al comité territorial del nuevo organigrama. Mantendrá como portavoz del Parlamento al granadino Carlos Rojas. Con Bendodo y Rojas contenta a las provincias más suspicaces, Málaga y Granada.
El congreso, que será presidido por el presidente provincial de Granada, Sebastián Pérez, contará con la presencia de los máximos líderes. Hoy estará De Cospedal, mañana Soraya Sáenz de Santamaría y el domingo Mariano Rajoy. Los ministros andaluces hablarán también. La incógnita sigue siendo Javier Arenas. Este congreso está pintado como su despedida de la política andaluza, como un homenaje. Está previsto que pronuncie un discurso en algún momento, pero el PP todavía no sabe cuándo.