Aún más castigo para la provincia más deprimida

Las medidas anunciadas ayer por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Congreso de los Diputados son muy duras. Las mayores que ha conocido España en muchos años y las reacciones no se han hecho esperar. Los sindicatos y los funcionarios anuncian movilizaciones para protestar por lo que consideran unos recortes absolutamente desproporcionados y los partidos políticos han arremetido contra el Partido Popular. La otra cara de la moneda la ponen los empresarios, que consideran que estas medidas servirán para que a medio-largo plazo, España vaya saliendo del tremendo boquete económico en el que se encuentra inmerso desde el año 2008.

Aquí en Cádiz las reacciones también fueron contundentes. Sin duda, la provincia más deprimida de España, la de mayor tasa de paro, será una de las que más sufra las consecuencias de unos recortes que se suman a los muchos que ya se han ido aplicando a lo largo de los últimos años. Para miles de gaditanos, llenar la cesta de la compra cada día será aún más complicado y las penurias por la que atraviesan tantas y tantas familias se verán todavía más agravadas.

Pero la medida que mayor daño puede hacer a la economía gaditana es la subida del IVA. Al perder los ciudadanos aún más poder adquisitivo, sin duda uno de los sectores que más se va a resentir es el turístico. Los responsables del mismo en la provincia no podían ocultar ayer su temor a que se produzca un desplome tanto en el número de pernoctaciones como en el de visitantes.

Cádiz, su provincia, pretende vivir del turismo como principal eje de su economía, aderezado con otros como el industrial. Para ello es necesario atraer a sus playas y ciudades a turistas extranjeros, pero no hay que olvidar que el principal 'cliente' de Cádiz es el turista nacional. El mismo que va a padecer una grave merma en su economía en los próximos meses, por lo que todo se hace aún más cuesta arriba.