Cuatro mossos irán a prisión por un delito de torturas

Cuatro agentes de los Mossos d'Esquadra, que fueron condenados a cuatro años y nueve meses por torturar a un ciudadano rumano al que detuvieron en 2006 por error y que posteriormente fueron indultados por el Gobierno, deberán ingresar en prisión. A pesar de que el perdón parcial del Ejecutivo rebajó sus penas a 2 años y, como no tenían antecedentes, en principio se libraban de la cárcel, la Audiencia de Barcelona ha desestimado los recursos de los cuatro policías y por tanto no podrán evitar el centro penitenciario.

La Audiencia ha ratificado su ingreso por la gravedad de la conducta y el hecho de que sean miembros de un cuerpo policial. «Existen razones de prevención general y especial, de peligrosidad criminal, de repulsa y alarma social que justifican el ingreso en prisión, para cumplir la pena impuesta, aunque la misma no exceda de los dos años», expresó la sala novena en su auto inicial, que ha servido de base para desestimar los recursos.

El caso comenzó en 2006, cuando los agentes detuvieron por error a un ciudadano rumano llamado Lucian Paduraru (que ahora vive en Reino Unido donde trabaja de albañil) a quien confundieron con un ladrón. Le tiraron al suelo, le golpearon y hasta le metieron una pistola en la boca y le amenazaron con tirarle «por un barranco» si no reconocía los hechos. La Audiencia de Barcelona, en su sentencia condenatoria, calificó el trato que soportó Lucian de «cruel en exceso, brutal y salvaje». Días después, el hombre denunció que le detuvieron ilegalmente y que le torturaron. La Audiencia de Barcelona les condenó a casi siete años, el Supremo rebajó la pena y posteriormente fueron indultados parcialmente por el Consejo de Ministros.