Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
El presidente del BCE, Mario Draghi. :: AFP
Economia

Los mercados esperan del BCE que baje los tipos tras la cumbre europea

La prima de riesgo española repunta hasta los 485 puntos y se sitúa por encima de la irlandesa

AMPARO ESTRADA
MADRID.Actualizado:

Los mercados tienen la vista puesta en el Banco Central Europeo (BCE) del que esperan que baje los tipos de interés este jueves una vez que la cumbre europea alcanzó un acuerdo la semana pasada que todos valoran positivamente, incluyendo a Mario Draghi, presidente del BCE. La reticencia del BCE a intervenir en los mercados mediante la compra de deuda en el mercado secundario -lleva cuatro meses seguidos sin hacerlo- a pesar de las tensiones registradas se explica porque, a juicio del Banco Central Europeo cada una de sus actuaciones ha retrasado la toma de decisiones en Europa. Pero ahora ya se han tomado medidas, varias e importantes, por lo que los analistas descuentan que «algo hará el jueves». José Ramón Iturriaga, socio de Avante Asesores, señala que «no hay presiones inflacionistas y la economía se está desacelerando no sólo en los países periféricos sino en la zona euro en su conjunto por lo que cabe esperar que el BCE baje entre 25 y 50 puntos básicos el tipo de interés, aunque más bien será sólo un cuartillo». Si bajara los tipos, sería la primera vez desde que existe la moneda única en que los tipos se situarían por debajo del 1%.

Además, Iturriaga señala que es previsible que el BCE adopte una medida extraordinaria de liquidez, posiblemente «una subasta como las que realizó en diciembre o en febrero». También Nuria Álvarez, analista de Renta 4, destaca que las expectativas están centradas en la rebaja de tipos. Y si se anticipa un movimiento del BCE, de la Reserva Federal de Estados Unidos no se espera menos. «Los mercados cada vez descuentan con mayor probabilidad que habrá más estímulos por parte de la FED, que ya advirtió que estaba preparada para hacer todo lo necesario», explica Álvarez.

El jueves será el día clave de la semana, con la reunión del BCE y una subasta del Tesoro español con bonos a diez años, que será un buen termómetro para saber cómo acogen los inversores la nueva situación de España tras la cumbre. Mientras llega ese día, la incertidumbre se mantiene. El diablo está en los detalles, dice el refranero, y el solo anuncio por parte de Finlandia de que bloquearía -aunque en realidad no puede- la compra de deuda soberana por el fondo de rescate permanente hizo que la prima de riesgo repuntase y acabase once puntos por encima del cierre del viernes. La prima de riesgo acabó en 485 puntos básicos (4,85 puntos porcentuales por encima de los bonos alemanes a diez años, que son la referencia). Los bonos españoles a diez años se situaron ayer en 6,37%, por encima de los bonos irlandeses a nueve años, que se colocaron en 6,34%. Es decir, que los inversores exigen una menor rentabilidad a Irlanda, país rescatado, que a España. Cuanto más riesgo se aprecia en un país más rentabilidad tiene que ofrecer para que al inversor le merezca la pena asumir ese riesgo.

A la expectativa

No obstante, los avances logrados en la cumbre «han cambiado algo sustancial que servirá para rebajar las incertidumbres de los euroescépticos», señala Iturriaga, «lo que la Bolsa recoge es que no se cumplen los escenarios apocalípticos». Ayer, el Ibex subió un 0,31% y mantuvo los 7.100 puntos. El resto de las bolsas europeas cerraron con subidas de algo más de un punto, a pesar de los malos datos que llegaron desde Estados Unidos y su ISM manufacturero. «En otro momento, las bolsas hubieran caído, pero el mercado está aguantando bien por la expectativa que tiene del jueves», valora Álvarez.

La inversión extranjera en deuda pública española ha bajado un 24,4% en los cinco primeros meses del año, al situarse en 212.506 millones de euros, 68.933 millones menos que al final de 2011. En mayo, los inversores extranjeros acumulaban casi el 37% de la deuda pública de España frente al 50,48% que tenían el año pasado. Febrero y marzo fueron los meses donde se registraron las mayores huidas de capital extranjero (24.832 y 24.994 millones). En mayo la caída se ha moderado a sólo de 922 millones.