La expectativa ante la cumbre salva al Ibex del 'rojo'

Sesión volátil la de hoy en la que comenzaba otra cumbre definitiva para el euro. El selectivo español estuvo debatiéndose entre los números rojos y los verdes durante toda la jornada. Y en un rango muy estrecho: entre los 6.600 y los poco más de 6.700 puntos. Al final, cerró la jornada en el nivel más alto de la sesión, en los 6.721,70 puntos, lo que supone un avance del 0,82%. En el resto de Europa, dominaron los números rojos. De hecho, en verde, al selectivo español sólo le acompañó el Ftse Mib de Milán, que ganó un 0,67%. En rojo, el índice que más perdió fue el Dax alemán, que sufrió un descenso del 1,27%, quizás afectado por el mal dato de paro que se publicó en Alemania: la tasa subió por sorpresa desde el 6,7% hasta el 6,8% y el número de nuevos desempleados fue de 7.000, por encima de los 3.000 previstos. "Alemania no será capaz de eludir los problemas económicos de sus socios", explicó Christoph Weil, analista de Commerzbank. "El segundo trimestre mostrará contracción económica y no habrá signos de mejora en los tres meses siguientes", añadió en declaraciones a Bloomberg. A continuación, el PSI-20 de Lisboa, que retrocedió un 0,99%. El Cac 40 francés, mientras, se dejó un 0,37%.

No sólo fue malo el dato del paro alemán. También lo fue el de confianza de la zona euro, que cayó hasta su nivel más bajo en más de dos años y medio.

En el selectivo paneuropeo, el valor más castigado fue Deutsche Bank, que retrocedió un 4,5%. Entre los diez valores que más cayeron, otros tres bancos, pero ninguno español: BNP Paribas, Société Générale e ING.

Deterioro de la deuda

Volatilidad en las Bolsas y deterioro de las deudas. La prima de riesgo de España llegó a subir desde los 537 puntos básicos hasta superar los 550. Al cierre se había relajado hasta los 542 puntos. La rentabilidad del bono a diez años cerró la sesión en el 6,94%. Pero llegó a superar el 7%. La prima de riesgo de España aumentó, en parte, por la reducción de la rentabilidad de los bonos alemanes, que bajó del 1,56% hasta el 1,51%. La prima de riesgo de Italia subió desde los 460 hasta los 465 puntos básicos y eso que la rentabilidad de los bonos italianos se mantuvo en el entorno del 6,17%. Y es que ayer Italia respiró después de salvar su subasta de bonos. El país logró colocar el importe máximo previsto, casi 5.500 millones de euros en bonos a diez años, aunque para ello tuvo que ofrecer un interés del 6,19%, el más alto desde diciembre.

La cumbre no despierta muchas confianzas. "La reunión posiblemente avance en el diseño de una hoja de ruta a largo plazo, pero no será capaz de dar un remedio rápido para estabilizar los mercados financieros", afirmó Jamie Searle, estratega de renta fija de Citi en Londres. "Las rentabilidades de España y de Italia se mantendrán bajo presión", añadió este analista en declaraciones a Bloomberg.

Pero, en realidad, Angela Merkel está sola en su propósito de dar muy pocos pasos hacia la resolución de la crisis. Sigue en su empeño de imponer una férrea austeridad a todo el continente antes de avanzar en la unión fiscal y bancaria. Antes de eso, impondrá el control centralizado de los presupuestos europeos. Pero tanto el presidente francés, François Hollande, como el primer ministro italiano, Mario Monti, y el presidente español, Mariano Rajoy, han pedido una intervención urgente. Mariano Rajoy, en particular, ha alertado sobre las dificultades de financiación que sufren muchas instituciones españolas. François Hollande apuntó: "He venido para adoptar decisiones muy rápidas para apoyar a países con problemas en los mercados", en referencia a España e Italia que, a su juicio, "han hecho considerables esfuerzos para arreglar sus cuentas públicas". Jyrki Katainen, el primer ministro de Finlandia, uno de los países más duros de la zona euro, también afirmó que los 27 discutirían la posibilidad de que los fondos de rescate compren deuda pública en el mercado secundario o, incluso, en el primario, si fuera deuda garantizada con colaterales, por ejemplo, inmobiliarios (¿el Museo del Prado?).

En el mercado de divisas, el euro cayó hasta 1,2426 unidades.

En el selectivo español, en rojo, la banca doméstica. La entidad que más cayó fue Bankia, que retrocedió un 3,85%. A continuación, el Popular, que retrocedió un 2,59%. el Sabadell se dejó cerca de un 2%. IAG, Gamesa y Grifols perdieron más de un 1%. Amadeus, un 1%. Mapfre, ArcelorMittal, Abengoa e Inditex completaron la lista de valores en rojo.

En el otro lado de la tabla, Repsol fue el valor que más ganó, con una revalorización del 3,07%. Entre los grandes, también Iberdrola se situó entre los mejores, con un repunte del 2,18%. BBVA, por su parte, ganó un 1,55%. Telefónica subió poco más de un 1%, mientras que el Santander se apuntó un 0,74%. Entre los mejores, Enagás, ACS e Indra, que subieron más de un 2%.

Fuera del selectivo, el peor valor fue San José, con un recorte del 7,69%. También Tavex perdió más de un 7%. En el otro lado de la tabla, Natraceutical subió un 6,87%. Y, a continuación, Reyal Urbis, que avanzó un 5%.

A Wall Street le hunde JP Morgan

En Estados Unidos, la sesión también comenzó con descensos. El Dow Jones al completo caía encabezado por JP Morgan. Parece que al final sus pérdidas por la operativa en derivados va a alcanzar los 9.000 millones de dólares, más de lo esperado. También pesaba el nerviosismo existente por Europa.

En la agenda macroeconómica de la sesión conocimos el dato definitivo del PIB del primer trimestre. De acuerdo con lo previsto, creció un 1,9% en tasa trimestral anualizada. El consumo decepcionó: subió un 2,5%, dos décimas menos de lo esperado. Y el paro semanal aumentó en mil personas más de lo calculado por los expertos, además de que se revisó al alza la cifra del mes anterior. Y el índice de actividad manufacturera de la Fed de Kansas se situó por debajo de lo esperado.

En el mercado de materias primas, descensos. El barril de Brent, de referencia en Europa, bajó más de un 1,5%, hasta los 92 dólares. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, cayó más de un 2,5%, hasta los 78,15 dólares. En los metales, el cobre bajó un 0,88% y el oro, un 1,5%, hasta los 1.554 dólares por onza.