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La limpieza viaria, con un coste de 11 millones de euros, se cobra a través de impuestos indirectos. :: L. R.
EL PUERTO

El coste de la limpieza viaria y recogida de basuras se dispara a 22 millones

La plantilla de FCC convoca huelga indefinida a partir del 2 de julio por la intención de rebajar los sueldos un 25% o eliminar jornadas laborales

LOLA RODRÍGUEZ elpuerto@lavozdigital.es
EL PUERTO.Actualizado:

El Ayuntamiento prepara un ajuste integral sobre el contrato del servicio de limpieza viaria y recogida de basuras que mantiene desde el 2007 con la empresa FCC. La primera revisión del canon que se ha hecho desde entonces supone una subida de los aproximadamente 9,6 millones anuales a más de catorce. Pero el coste real del servicio se sitúa actualmente en 22,1 millones de euros. Una cuantía inasumible para las arcas municipales, cuyos gestores tienen de nuevo ante sí una convocatoria de huelga indefinida a partir del 2 de julio por la paralización de la negociación del nuevo convenio colectivo y las desavenencias entre trabajadores y FCC.

La concejala de Medio Ambiente, Marta Rodríguez, explicó que la subida del canon se debe al incremento del IPC y de los costes laborales de los trabajadores, hasta en un 29% en los últimos cuatro años.

La tasa no alcanza «ni de lejos»

La responsable municipal detalló que la tasa que se cobra a los ciudadanos por el servicio de recogida supone una recaudación de 6,5 millones. «Esto no alcanza para pagar ni la recogida -3,8 millones- ni el tratamiento de residuos, cifrado en 7,3, que hacen un total de 11,1 millones. Lo que demuestra hasta qué punto la tasa, que pagamos todos los portuenses a través de la factura del agua, no cubre ni de lejos el servicio». La limpieza viaria, que supone un 80% del contrato, se contabiliza por otro lado con un coste de 11 millones de euros que se pagan a través de impuestos indirectos. «En total hablamos de 22,1 millones. Una cifra desorbitada que precisa de un ajuste inmediato a la baja que se adapte a la realidad actual del presupuesto municipal para que los portuenses no tengan que soportar con más impuestos el encarecimiento de esta prestación».

Así las cosas el área de Medio Ambiente lleva ya meses trabajando en el recorte del contrato, que según Rodríguez pasará por una reorganización del servicio, sin precisar si habrá o no despidos. Este es uno de los temores de la plantilla de FCC, que está dispuesta a congelar sus salarios a cambio de que no se ejecuten las reducciones de jornadas que plantea la empresa y que ya en 2010 se rebajaron en un 35% con la desaparición de los eventuales.

Sin refuerzo en verano

De hecho, en estos momentos no se están cubriendo las vacaciones ni las bajas y que tampoco está previsto el refuerzo de plantilla que habitualmente se ha hecho durante los meses de verano. El recorte planteado ahora dentro de la negociación del nuevo convenio es del 15%. Esta propuesta fue lanzada después de la bajada del 25% de la masa salarial. Ambas han sido rechazadas por la plantilla, formada por 282 trabajadores fijos, la mitad fijos a tiempo completo y la otra mitad a tiempo parcial.

El secretario del comité de empresa, Javier Espinar, señaló que la asamblea solo ha aprobado por mayoría absoluta la congelación de salarios durante el presente año. «Somos conscientes de que la situación económica es mala, pero nosotros estamos dispuestos a no aplicarnos el IPC a diferencia de lo que están haciendo en casi todas las poblaciones de alrededor. Lo otro sería renunciar a más de cuarenta años de negociaciones con la empresa y el Ayuntamiento. Nosotros no queremos ir a la huelga, porque perdemos dinero, pero no vamos a dejar que hagan esto». Rodríguez señaló no obstante que la plantilla «no puede exigirle al ciudadano que con sus impuestos y con más presión fiscal se mantengan sus altos costes laborales».

Con respecto al convenio, las partes se han reunido ya en ocho ocasiones, pero desde hace un mes y medio no hay mesa de negociación. En este sentido, la concejala de Medio Ambiente les instó a sentarse de nuevo y les pidió que agoten todas las vías posibles para llegar a un acuerdo, ajustar el servicio y su coste a la realidad económica del Ayuntamiento.