Sergio Busquets y Xabi Alonso disputan un balón en un entrenamiento de España. :: EFE
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Dobles parejas

Ramos y Piqué, en el eje de la defensa, y Xabi Alonso y Busquets, como pivotes, son básicos en el esquema de Del Bosque

DONETSK. Actualizado: Guardar
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El eje defensivo y el control táctico de España descansan en las dobles parejas más importantes para Vicente del Bosque en la Eurocopa de Polonia y Ucrania. Sergio Ramos y Piqué, los renovados centrales para la cita continental, y Xabi Alonso y Busquets, que repiten como pivotes la experiencia previa en el Mundial, se han convertido en indispensables para el seleccionador, consciente de que el equilibrio del equipo depende en buena parte de ellos.

Sendas combinaciones Barcelona-Real Madrid, que, después de los titubeos iniciales en el debut ante Italia, han ido de menos a más tras ajustar algunos reglajes. La sincronización, clave en posiciones en las que el trabajo de uno necesita siempre la complicidad del otro, es óptima y 'La Roja' ha mejorado en labores de contención. Si los cuatro están entonados en la exigente revancha ante Francia, el éxito estará muy cercano.

El futbolista sevillano del club blanco fue incluido en el once ideal de Sudáfrica, pero como lateral derecho. Su reconversión como central a las órdenes de Jose Mourinho ha convencido a Del Bosque, que ha apostado por él como compañero de Piqué a pesar de que nunca habían jugado juntos con asiduidad.

Su acoplamiento aún no es perfecto -el azulgrana y su 'casi hermano' Puyol no necesitaban ni mirarse en el campo para entenderse-, pero ha ganado enteros y solo es cuestión de tiempo que la pareja cuaje del todo. Eficaces ambos en el juego aéreo, las mayores fortalezas del catalán son su excelente lectura táctica y la salida saneada del balón, clave cuando los rivales intensificn la presión y es complicado conectar con los centrocampistas cómodamente. Sergio Ramos es su complemento ideal por su velocidad en el repliegue y por su portentosa fuerza física.

Elogios

«Somos una pareja joven, pero la evolución se irá viendo porque ya nos vamos entendiendo mejor», declaró ayer el andaluz en la sala de prensa del Donbass Arena, en Donetsk. «El tiempo y los partidos nos han concedido una mayor sincronización. Piqué es un grandísimo central», añadió para devolver los elogios que le había dedicado días antes el blaugrana.

Benzema es sin duda uno de los futbolistas franceses al que los centrales tendrán que vigilar más de cerca. «He hablado con Karim estos días porque tenemos muy buena relación. Le ha faltado hacer goles en esta Eurocopa, pero es de los que marcan la diferencia. Al menor despiste, te puede hacer mucho daño. Esperemos que no tenga el día», dijo el internacional del Madrid, quien añadió que las tensiones de los clásicos son ya agua pasada. «Hablar de este asunto sería un error. No hay ninguna herida», zanjó.

La otra dupla que mide la temperatura de 'La Roja' conforma el doble pivote, irrenunciable para el seleccionador si los partidos se desarrollan como él espera. Cuando Xabi Alonso y Sergio Busquets están compenetrados, los enemigos sufren. Solamente son dos, pero su lectura de los partidos es tan certera que parece que cubran toda la medular en el momento en el que los rivales tratan de armar el ataque.

El catalán es el apoyo ideal en los rondos, la pared que siempre devuelve la pelota en ventaja a los compañeros. El tolosarra es todo eso y, además, oxigena al equipo cuando hay atasco con sus precisos envíos en largo a los laterales. Su potente disparo a puerta es otro recurso para 'La Roja', en ocasiones obsesionada con hacer los goles desde el corazón del área. «Creo que Francia intentará ser fiel a su juego», afirmó ayer el blaugrana. La misión de las dobles parejas es evitarlo.