El Ibex acaricia los 6.800 con el rescate a la vista

Los mercados europeos se despertaron con la noticia que publicaba el 'Daily Telegraph' según la que Europa estaría preparando un plan de ayuda para España e por valor de 750.000 millones de euros. El dinero se utilizaría para comprar deuda pública de ambos países en el mercado secundario y, de esa manera, bajar sus costes de financiación, de acuerdo con los objetivos que se marcaron los miembros del G-20, por lo que no sería una ayuda directa al país, aunque se desconoce si conllevaría condicones para los Estados beneficiarios. Se trata de una propuesta de Italia que el presidente francés, Françoise Hollande, respaldaría. La toma de esta decisión, podría suponer un cambio sustancial de la posición de la canciller alemana, Angela Merkel, salió de la reunión del G-20 con una mayor disposición a respaldar una decisión de este tipo. Pese a que el portavoz de Asuntos Monetarios de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj, rechazó la posibilidad de que se usen los fondos de rescate de la Unión Europea para comprar deuda, tanto los índices de renta variable como la deuda mejoraron sustancialmente. No flaquearon en ningún momento. Además, Altafaj añadió que una ayuda así no resolvería los problemas estructurales de las economías española e italiana.

Con ello, la prima de riesgo de España bajó hasta los 513 puntos básicos y el interés del bono a diez años se alejó sustancialmente del 7%, hasta situarse en el 6,74%, tras registrar la mayor caída del año. A la bajada de la prima de riesgo de España también contribuyó la fuerte subida de la rentabilidad del bono alemán a diez años, que terminó la jornada en el 1,61%. Y es que los 'hedge funds' están apostando por un movimiento de fuertes ventas en deuda pública alemana. De hecho, algunos consideran que en el plazo de un año las rentabilidades pueden duplicarse. Puede que por la reducción de la aversión al riesgo una vez se resuelvan los problemas de la periferia. O porque en realidad toda la zona euro está en cuestión. O porque la resolución de los problemas europeos pueda correr a cargo de las finanzas alemanas.

En otros plazos, también bajó la rentabilidad del bono español. Por ejemplo, en el caso del dos años, la rentabilidad cayó por debajo del 5%, mientras que el bono a cinco años estuvo a punto de caer por debajo del 6%.

Por eso, España se enfrenta mañana con un mejor aspecto a los mercados: intentará colocar entre 1.000 y 2.000 millones en bonos a dos, tres y cinco años. La de deuda a corto plazo del martes no fue mal.

Mejora, pues, de la deuda española, pese a que la cámara de compensación LCH.Clearnet decidió elevar las garantías exigidas para operar con bonos españoles como consecuencia del incremento de la prima de riesgo en los últimos días.

También disminuyó la prima de riesgo de Italia: se estrechó hasta los 413 puntos básicos. La rentabilidad de su bono a diez años se redujo hasta el 5,74%. España siguió estando cien puntos básicos peor que Italia.

El mercado de divisas, Grecia y la Fed

En el mercado de divisas, el euro se mantenía por encima del nivel de 1,27 unidades. Además de la posibilidad de un rescate de España y de Italia, le apoyaba la creación de un Gobierno de coalición en Grecia, con Nueva Democracia, el PASOK e Izquierda Democrática, despejando así una de las incógnitas. Pero tampoco hay que perder de vista que los mercados estaban expectantes ante la reunión de política monetaria de la Reserva Federal norteamericana en la que, seguramente, se decidiría la puesta en marcha de algún programa de estímulo. Quizás, la mera renovación de la 'operación twist', que consiste en la venta de bonos a corto plazo para comprar bonos a largo. Pero también existe la posibilidad de que ponga en marcha medidas de mayor alcance. Y así lo cotizaba el euro.

Las materias primas, en cambio, no apostaban por la expansión monetaria: tanto el barril de Brent como el de West Texas sufrían descensos de más de un 2% y el oro caía cerca de un punto porcentual.

En Estados Unidos, la apertura era equívoca, a la expectativa de la decisión final que tomara la Reserva Federal y que no se conocería hasta una hora después del cierre de los mercados del Viejo Continente. Al final, la Fed decidió extender la 'operación twist' hasta final de año y por valor de 267.000 millones de dólares. Y no entusiasmó. Pero tras un primer efecto negativo, se dio la vuelta y comenzó a subir. Pero ello no evitó que los índices de renta variable europeos cerraran la sesión con una significativa subida. El más rentable fue el Ftse Mib de Milán, que registró una revalorización del 2,13%. A continuación, el Ibex-35, que se apuntó un 1,53%, para dar un último cambio en los 6.796,10 puntos. Fue de menos a más. Y registró un acelerón cuando ya se confirmó la creación del nuevo Gobierno griego. Llegó a superar en algún momento los 6.800 puntos. Pero se quedó un paso atrás. Tras el selectivo español, el PSI-20 de Lisboa, que se apuntó un 1,36%. Los demás indicadores del Viejo Continente no llegaron a subir un punto porcentual: el Dax alemán ganó un 0,45% y el Cac 40 francés, un 0,28%.

Sólo cinco valores del Ibex en negativo

En el selectivo español, únicamente cinco valores terminaron la jornada en rojo. El que más cayó fue Sacyr Vallehermoso, que retrocedió un 0,91%. A continuación, Abertis, que perdió un 0,64%. Mediaset e Inditex se dejaron alrededor de un 0,3%. Dia completó la lista de valores en negativo con un retroceso del 0,09%.

En el otro lado de la tabla, el mejor valor fue el Popular, con una revalorización del 5,11%. Le siguieron Abengoa y ACS, con revalorizaciones de más de un 4%. Entre los mejores, Bankia, que rebotó un 3,96%, casi como Acciona e Indra.

Entre los grandes valores, el mejor fue BBVA, con una revalorización del 3,39%. Santander, por su parte, ganó un 2,73%. Los otros "blue chips" se quedaron atrás: Repsol ganó un 1,31%; Telefónica e Iberdrola, un 0,65% y un 0,60%, respectivamente. La operadora, por la rebaja de la calificación crediticia que le propinó Moody's.

En el Mercado Continuo, Renta Corporación lideró los ascensos con una revalorización del 37,50% después de que anunciara la venta de dos edificios en Madrid por 40 millones de euros. A continuación, quizás contaminadas, otras inmobiliarias, como Colonial y Realia, que ganaron un 9,81% y un 8,91%, respectivamente. Montebalito también ganó más de un 8% y Urbas, un 7,69%.

En el otro lado de la tabla, Dermoestética, que se dejó un 8,75%, y San José, que bajó un 7,75%.