Interior de la Bolsa de Madrid. / Foto: Efe | Video: Ep
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Grecia no alivia, tensa

El Ibex cierra con una caída el 2,96% en una jornada negra

MADRID Actualizado: Guardar
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El pueblo griego dio la victoria a Nueva Democracia en las elecciones, el partido de "los buenos", el que tranquilizaría los mercados, el que alejaría la posibilidad de que Grecia saliera del euro. Pero, igual que el rescate del sector financiero español, tras una primera reacción positiva de la moneda única, que superó el nivel de 1,27 dólares en los primeros cambios de la sesión, de las Bolsas (las asiáticas terminaban su primera jornada de la semana con nada despreciables subidas) e incluso de las deudas periféricas, con las primas de riesgo reduciéndose algunas puntos, volvieron las tensiones como nunca antes habíamos visto. Especialmente contra España. Porque la prima de riesgo de España llegó a rozar los 590 puntos básicos, aunque al cierre se relajó ligeramente, para terminar la sesión en los 574 puntos básicos, un nuevo récord, con el tipo de interés del bono a diez años marcando un máximo desde la entrada en circulción del euro en el 7,15%. El viernes, la prima de riesgo había terminado en los 543 puntos básicos y el interés del bono a diez años, en el 6,87%. Pero da todavía más miedo observar el comportamiento de la deuda española a corto plazo: la prima de riesgo del bono a dos años subió desde los 492 hasta los 542 puntos básicos; el interés de esa deuda subió del 4,99% hasta el 5,44%.

Veremos cómo coloca esta semana el Tesoro los 5.000 millones de euros en deuda que tiene planeado: mañana, deuda a corto plazo, y el jueves, deuda a largo.

En Italia vimos algo similar: la prima de riesgo marcó máximos del día en los 480 puntos básicos, pero se relajó hasta los 466 puntos al cierre, por encima de los 448 puntos básicos en que terminó la semana pasada. El interés del bono a diez años subió desde el 5,92% hasta el 6,08%. El deterioro de la deuda italiana fue mucho menor.

La rentabilidad del bono alemán a diez años se redujo desde el 1,43% hasta el 1,41%. El Banco Central Europeo, pese a las tensiones, no compró deuda. ¿A qué espera? Con todo esto, el euro también perdió posiciones: al cierre cotizaba por debajo del nivel de 1,26 dólares.

¿Por qué no hay tregua?

¿Qué ocurrió para que, con la victoria de Nueva Democracia, no se relajaran los mercados? Los especuladores buscan nuevas víctimas. Intuyen que el triunfo del partido pro-rescate es un nuevo factor a favor de las políticas de austeridad, que en todos los casos es fatal. Se ha demostrado un fracaso en los tres países rescatados y agravará la situación de Italia y de otro que lo ha sido ya a medias, España. La publicación de los datos de morosidad alimenta esos temores: la morosidad del crédito concedido por el sector financiero subió en abril hasta el 8,72% y se sitúa a sólo cuatro décimas de los máximos históricos (9,15%). Mientras la mora de las hipotecas a particulares se sitúa en el 3,07%, la de los promotores se ha disparado hasta el 22,8%.

Aunque el líder de Nueva Democracia, Andonis Samarás, en el último tramo de la campaña abogara por una renegociación de las condiciones del préstamo europeo y Alemania mostrara una actitud más abierta de aquella a la que nos tiene acostumbrados, lo cierto es que por la tarde la canciller alemana, Angela Merkel, descartaba tajantemente una flexibiliación de las condiciones del rescate griego. Normal: los griegos han votado austeridad, la austeridad está legitimada, Merkel tiene la coartada perfecta. Pero eso no descarta que haya momentos de tensión en la formación de la coalición Nueva Democracia-PASOK, en la presión por renegociar las condiciones del rescate que a todas luces es imposible de cumplir, en la calle, con una Syriza muy combativa y muy reforzada.

Pese a este resultado electoral, Citi volvió a decir que Grecia tiene hasta un 75% de probabilidades de abandonar el euro en los próximos 12 a 18 meses. Y decimos "pese a este resultado" no porque Syriza quisiera que Grecia abandonara la Unión Monetaria. Aunque, según Fitch, la victoria de los partidos pro-rescate reduce la presión sobre las calificaciones de otros países de la zona euro, además de que apuntó, respecto a Grecia, que reduce las probabilidades de quiebra desordenada y de salida del euro, aunque sea a corto plazo.

Angela Merkel no se ablandó en la cumbre del G-20 y eso que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, está intentando buscar una coalición por el crecimiento económico.

En Bolsa, sí celebró el resultado el índice griego. Quizás por la amenaza de salida del euro pero, también, porque el programa electoral de Syriza incluía subidas de impuestos, por ejemplo, algo que no suele ser muy popular en el mercado. Al cierre, avanzaba un 3,64%.

Pero el resto de los indicadores terminaron la jornada con descensos. El más castigado, el Ibex, que cedió un 2,96%, hasta los 6.519,90 puntos. A continuación, el Ftse Mib de Milán, que retrocedió un 2,85%. Más lejos, el Cac 40 francés, que perdió un 0,69%, sobre todo penalizado por el comportamiento de sus bancos: Société Générale y BNP Paribas se dejaron más de un 4%. En verde, el Ftse 100 británico, al margen de los problemas de la zona euro, con una revalorización del 0,22%, mientras que el PSI-20 de Lisboa se apuntó un 0,27%, y el Dax alemán ganó un 0,30%. Y, mientras, en Estados Unidos, apertura mixta.

En el selectivo español, Bankia fue el valor que más cayó, con un recorte del 9,02%. A continuación, Gamesa, que retrocedió un 5,59%. Iberdrola también perdió más de un 5%. Entre los peores, un buen puñado de entidades financieras, con Bankinter, Santander y BBVA a la cabeza, los tres con pérdidas de más de un 4%. Y más grandes valores entre los más castigados: Telefónica retrocedió un 3,92%, mientras que Repsol YPF se dejó un 3,25%.

El resto de las entidades financieras también se apuntaron al rojo, aunque sus descensos fueron inferiores a los de las grandes: CaixaBank perdió un 2,32%, Sabadell y Popular, un 0,92% y un 0,74%, respectivamente.

El Banco Mundial critica el rescate español

No sorprende este comportamiento después de las declaraciones vertidas por el presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, en el G-20. Zoellick criticó el rescate de la banca española, de cómo se ha gestionado y los escasos detalles de los que aún disponemos. Un hito más de lo mal que lo están haciendo los líderes europeos en esta crisis. "Es alucinante que estemos hablando de poner 100.000 millones encima de la mesa y el mercado lo tome como algo negativo", aseguró Zoellick el domingo.

En verde, sólo cinco valores. El que mejor se comportó fue IAG, que sumó una revalorización del 3,59%, quizás ayudado por la caída del precio del crudo. El barril de Brent, de referencia en Europa, bajó hasta los 96 dólares. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, caía hasta los 83 dólares. Incluso el oro y la plata cayeron, pese a los temores que había en el mercado.

Subidas también para las acereras: Acerinox y ArcelorMittal ganaron un 1,11% y un 0,09% respectivamente. Abertis y Amadeus fueron los otros dos valores que terminaron la sesión en verde.

Fuera del selectivo, Solaria lideró los avances, con una revalorización del 10,46%, después de anunciar la venta de una planta en Italia. Y en el otro lado de la tabla, sólo dos valores cayeron más que Bankia: Funespaña y Montebalito, que bajaron un 12,37% y un 10,61%, respectivamente.