Los mercados dictaminan
Los expertos creen que aliviará la presión sobre España pero alertan de su impacto sobre la deuda pública
MADRID.Actualizado:¿Conseguirá el rescate a la banca rebajar la presión sobre España como dice el Gobierno? ¿O será un estigma que hundirá todavía más la credibilidad del país? La respuesta la darán hoy los temidos mercados, que emitirán su veredicto a través de la ya famosa prima de riesgo y la Bolsa. La mayoría de los expertos consultados se muestran positivos y se decantan por la primera opción. Consideran que la línea de crédito de 100.000 millones de euros despeja la principal incertidumbre que lastraba a España, las dudas sobre su capacidad para financiar el agujero de la banca. Pero también hay quienes se quedan con la otra cara de la moneda, la cruz: es el Estado el que recibe el préstamo y, por tanto, deberá cargarlo sobre la deuda pública y asumir su riesgo y la responsabilidad de su devolución.
Los mercados ya fueron descontando a lo largo de la semana pasada la posibilidad de un rescate parcial para España, centrado únicamente en el sector financiero. El plan, aprobado finalmente el sábado por el Eurogrupo, tuvo buena acogida. La Bolsa subió un 8%, mientras que la prima de riesgo se alejó de los 500 puntos hasta los 488.
Lo lógico es que, tras conocerse que el país va a recibir 100.000 millones de euros a un interés bajo de en torno al 3%, se mantenga el optimismo. «Es una solución magnífica. Estaba clarísimo que lo urgente y lo necesario era apuntalar el sistema financiero. Era un secreto a voces que se necesitaban entre 40.000 y 50.000 millones de euros, una cantidad manejable pero no se sabía de dónde sacar», apunta Juan Mari Otxoa, director de análisis de Fineco. A su juicio, los especuladores han aprovechado el miedo «irracional» que había sobre la banca para «lanzarse a degüello» sobre el país y muchos optarán ahora por retirarse. También cree que, en caso de que se tuerzan las cosas, el BCE entrará en escena para sacar la cara al acuerdo del Eurogrupo. «El dinero de Europa permitirá que se saneen los balances de todas las entidades, lo que reducirá la incertidumbre que rodea a la economía española», coincide Luis Garicano, catedrático de la London School of Economics, que, sin embargo, también advierte de que «es el Reino de España el responsable de la devolución».
Si al final se tienen que utilizar los 100.000 millones de la línea de crédito, la deuda pública se dispararía al 90% del PIB. Es por este motivo por el que el banco de inversión Morgan Stanley considera que el crédito concedido por Europa «difícilmente será el cortafuegos» que cambie la percepción negativa de los mercados sobre España y que frene el contagio si no gusta el resultado electoral de Grecia. Desde este punto de vista, el rescate solo refuerza el peligroso vínculo que existe entre la banca y la deuda soberana porque el riesgo del sector financiero se traslada al Estado.
Santiago Carbó, catedrático de la Universidad de Granada y asesor de la Reserva Federal, cree que se ha dado un paso importante, pero no se acaban los problemas. «Se necesitan más avances en la integración europea y, desde luego, España va a tener que tomar todas las medidas necesarias para cumplir con el objetivo del déficit», advierte.