Los cortes de tráfico de los trabajadores de Navantia y el hospital

En estos últimos días hemos visto cómo se suceden los cortes de tráfico en nuestra ciudad y en el puente Carranza. Los trabajadores de Navantia y los del Hospital Puerta del Mar salen a la calle, unos para reivindicar más carga de trabajo en la factoría naval, y otros para presionar a la Junta para que retire la reforma sanitaria.

En ésta época que nos ha tocado vivir, estamos inmersos en una gran crisis. Esto hace que los gobiernos, el central y los autonómicos, tengan que acometer grandes reformas para sacar al país de donde está. Lo estarán haciendo mejor o peor, pero lo están intentando. Lo que no podemos ni debemos de ninguna de las maneras es, encima de como está la situación, perjudicarnos a nosotros mismos. Todo el mundo tiene derecho a protestar y a manifestarse pero, ¿de verdad que estos trabajadores no se dan cuenta de que con cortar el tráfico lo único que hacen es perjudicar a otros trabajadores igual que ellos? No puedo entender cómo van a pedirle al Gobierno carga de trabajo destrozando señales de tráfico, quitamiedos y todo lo que se encuentren por el camino. ¿Quizá eso le va a doler al Gobierno? ¿De verdad creen que eso lo van a pagar Rajoy o Griñán? No señores. Eso nos va a doler y lo vamos a pagar todos nosotros. Igualmente digo con los trabajadores del Hospital Puerta el Mar. ¿De verdad creen que cortando la Avenida van a hacer que Griñan y Valderas cambien la reforma sanitaria que ellos quieren?

Señores, hay que hacer las cosas con un poco de cabeza. La grave situación no nos puede llevar a perder el norte y fastidiar al que está igual o peor que tú. Los trabajadores de Navantia si lo que quieren es que Rajoy les escuche, que se manifiesten en Madrid, en la Moncloa o en un lugar donde el presidente pueda oír sus protestas. Y a los trabajadores del hospital exactamente lo mismo. Que se vayan a San Telmo y allí impidan que los consejeros de la Junta entren en la Cámara.

Todos unidos quizá podamos conseguir mucho más que si cada uno hace la guerra por su cuenta. Si pretenden que con su actitud les apoyen los demás ciudadanos están muy equivocados. Consiguiendo todo lo contrario, que el ciudadano los vea como los que les están fastidiando. Cambien su actitud y todos seremos Navantia y todos seremos personal sanitario.