Putin firma una normativa para acallar las protestas callejeras
MOSCÚ. Actualizado: GuardarPese a las demandas de las organizaciones de derechos humanos, el presidente Vladímir Putin estampó ayer su firma en la nueva ley reguladora de mítines y marchas callejeras con un aumento importante de las multas por infracción. El presidente del Consejo de Derechos Humanos adscrito a la Presidencia, Mijail Fedótov, sostuvo que la norma es «anticonstitucional».
Las sanciones para los manifestantes que violen la ley oscilan entre los 250 y los 7.500 euros, para los dirigentes políticos implicados pueden llegar a los 15.000 euros y para los convocantes alcanzan los 25.000 euros. Hasta ahora la multa máxima era de 1.250 euros, lo que significa que la nueva normativa establece cantidades veinte veces superiores. El impago será castigado con trabajo social o con la cárcel.
Se da la circunstancia de que se tipifica como infracción, no ya el uso de la violencia o la desobediencia a la Policía, sino superar el número de manifestantes declarados en la solicitud de permiso, dificultar la circulación de peatones por la acera e incluso pisar el césped. Tampoco están permitidas las aglomeraciones en un lugar determinado sin permiso previo de las autoridades. Las veladas literarias al aire libre entran en esa categoría.
El opositor y ex campeón mundial de ajedrez, Gari Kaspárov, estima que el interés de Putin no es tratar de mejorar la seguridad en las protestas sino «acabar de una vez por todas con las protestas contra el fraude electoral». Las movilizaciones se intensificaron el pasado mes de diciembre, tras los comicios parlamentarios, y continúan cada fin de semana.