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Don Juan Carlos brinda con el presidente chileno, Sebastián Piñera, tras el almuerzo celebrado en el Palacio de la Moneda. :: REUTERS
ESPAÑA

El Rey reconoce que España pasa por el «momento más difícil» de la crisis

Don Juan Carlos alaba desde Chile la austeridad económica, pero asegura que hace falta crecimiento «para dar trabajo»

ANDER AZPIROZ
MADRID.Actualizado:

El Rey redobló en Chile sus esfuerzos por abrir a las empresas españolas potenciales vías de negocio en América Latina. Tras su paso por Brasilia, el Monarca visitó ayer en el Palacio de la Moneda de Santiago al presidente del país andino, Sebastián Piñera.

En la misma línea que el discurso pronunciado ante Dilma Rousseff, don Juan Carlos intentó ofrecer una imagen solvente de España ante la comunidad internacional para lo que incidió en las decisiones ya adoptadas para reformar el sistema financiero y la necesidad de recibir apoyo de los socios comunitarios. Durante el brindis tras el almuerzo que compartió con Piñera, el Rey alabó los esfuerzos realizados por España para salir del agujero económico en el que se encuentra sumida. «Es el momento más difícil de la crisis, pero las cosas han empezado a mejorar», señaló para, a continuación, apuntar que la Unión Europea requiere de austeridad y disciplina, pero no logrará salvar su proyecto político sin una apuesta por el crecimiento. «Se necesita además solidaridad para hacer soportables las cargas financieras que hoy abruman a algunos de nuestros países», afirmó.

En referencia a los recortes aplicados desde el Gobierno, don Juan Carlos habló de «un tratamiento absolutamente necesario para recuperar la salud perdida». «Pero -añadió- se necesita también crecimiento para dar trabajo a nuestros conciudadanos y mantener el modelo social que hemos construido a lo largo de los últimos años». Para el Rey, la crisis actual exige una única receta: «Más Europa, no menos Europa».

Al igual que en su cita con Rousseff, don Juan Carlos estuvo acompañado en Santiago de Chile por algunos de los máximos representantes del empresariado español, ávidos de ampliar su presencia en un país que presume de la mayor seguridad jurídica del continente latinoamericano para las inversiones que exigió el Monarca el pasado lunes a las economías modernas. Unas palabras que se interpretaron como una crítica directa a las recientes nacionalizaciones aplicadas por los Gobiernos de Argentina y Bolivia sobre intereses españoles.

Alianza del Pacífico

El Monarca afrontará hoy su último día de viaje por tierras latinoamericanas antes de regresar a España. Lo hará en pleno desierto de Atacama, donde mantendrá un encuentro con los presidentes de Colombia, México y Perú, además del propio Piñera, en el marco de la IV Cumbre de la Alianza del Pacífico. Este grupo, en el que también participan en calidad de observadores Costa Rica y Panamá, tiene como objetivo el fortalecer los lazos comerciales entre estos países.

Ante estos mandatarios el Rey apelará a la participación en la Cumbre Iberoamericana que se celebrará en Cádiz el próximo noviembre y evitar así el fracaso que supuso el encuentro del año pasado en Paraguay, del que se ausentaron 11 de los 21 jefes de Estado convocados.