Nikolic defiende la adhesión de Serbia a la UE, pero con Kosovo
El nuevo presidente denuncia «las malas privatizaciones, la corrupción y el crimen» como causantes de la degradación del país
VARSOVIA. Actualizado: GuardarEl nuevo presidente de Serbia, Tomislav Nikolic, que lidera el ultranacionalista y populista Partido Progresista Serbio (SNS), defendió ayer la integración de su país en la Unión Europea (UE), pero sin renunciar a Kosovo, un territorio de mayoría albanesa que se independizó de Belgrado en 2008. Durante el acto de juramento de su cargo, Nikolic declaró: «Deseo una Serbia que será miembro de la Unión Europea y que no renunciará nunca a su integridad, a Kosovo».
Aun así, Nikolic se pronunció a favor de reanudar «enseguida» el diálogo con los dirigentes de Pristina y defendió «una política de consenso» entre los partidos serbios respecto del joven Estado soberano. Kosovo ha sido reconocido por Estados Unidos y los principales países de la UE, pero grandes potencias como Rusia, China e India se han opuesto a su independencia.
En el pasado, Nikolic, que fue vicepresidente del difunto Slobodan Milosevic, se mostró opuesto a la UE. Los cambios ocurridos en Europa y en la propia sociedad serbia le obligaron a variar su posición y defender la integración europea de Serbia. De la mano del anterior jefe del Estado, el reformista y europeísta Boris Tadic, Belgrado logró el estatuto de candidato a la adhesión en la UE.
Acercamiento a Rusia
El nuevo presidente, de 60 años, es un ferviente prorruso, y en su intervención defendió las relaciones con este país y el papel de Serbia como intermediario entre el Oeste y el Este del Viejo Continente. «Quiero una Serbia diferente, por fin unida en la lucha por una vida mejor, una Serbia liberada del miedo, una casa con dos puertas, una en el Este y otra en el Oeste», indicó el mandatario, que será investido oficialmente, en presencia de invitados extranjeros, el próximo 11 de junio en Belgrado. La primera visita como jefe de Estado a Bruselas está prevista para mediados de este mes.
Tomislav Nikolic describió una situación de Serbia con tintes dramáticos y acusó a Boris Tadic de ser el principal responsable. «La causa de esta crisis tiene por origen las malas privatizaciones, la corrupción y el crimen», así como la «falta de confianza en las instituciones», dijo Nikolic, quien anunció «unas perspectivas de futuro pesimistas», porque existen «unos medios controlados por las élites políticas y una reforma del sistema judicial al servicio de los intereses de los partidos».