La presión sobre la deuda y la Bolsa se intensifican
Bankia se desploma otro 16,25%, tras revelar las pérdidas de su banco matriz y su elevado riesgo inmobiliario
MADRID.Actualizado:La presión de los inversores se intensifica, y España se está quedando sola ante el peligro. Su prima de riesgo se mantiene en zona próxima al rescate, mientras la bolsa de valores sucumbe a la desconfianza en los valores bancarios. Mientras los principales parqués europeas cerraron este martes con notables alzas, Madrid se desplomó de nuevo. Las acciones de Bankia, el banco nacionalizado que necesita una inyección superior a los 23.000 millones de capital público, se hundieron un 16,25% adicional tras informar al mercado de que BFA, su entidad matriz, tuvo pérdidas de 3.318 millones en 2011, y de que el riesgo inmobiliario problemático del grupo ronda los 45.000 millones.
Por el momento, según la revisión del nuevo equipo gestor, la exposición problemática de BFA-Bankia al sector inmobiliario rondaba a cierre de 2011 los 45.000 millones, casi 10.000 millones más que lo publicado anteriormente. Desde su estreno en el mercado de valores, Bankia ha perdido el 69,8% de su capitalización. El IBEX 35 de la bolsa española cerró en 6.252 puntos, tras ceder un 2,34 % en la sesión, y ya acumula un descenso del 27 % desde que empezó el año. La práctica totalidad de la banca padeció una nueva penalización: Banco Sabadell cedió el 4,29%, Bankinter, el 4,27%, Banco Popular, el 3,33%; Caixabank, el 2,59%; BBVA, el 2,62%, y Banco Santander, el 2,43%.
En sentido contrario evolucionaron la Bolsa de Londres, donde el FTSE-100 de los principales valores bancarios ganó el 0,65%, el CAC 40 de París, que registró un avance del 1,37%, y el Dax de Francfort, con subida del 1,16%. Los principales parqués de la zona euro olvidaron por un día los problemas de la moneda común, y hasta las vicisitudes de Grecia, y se anticiparon a las medidas de reactivación de China. Incluso el indicador de referencia de la Bolsa de Milán progresó el 0,38%.
El pesimismo en torno a la banca lastró de nuevo a la prima de riesgo. Durante la sesión bursátil, el diferencial de las obligaciones españolas a diez años respecto a los bonos germanos del mismo plazo se apuntó un nuevo máximo de 515,7 puntos básicos, aunque posteriormente se relajó, para quedar al cierre en 509 unidades. La comparación con Italia sigue siendo favorable al país transalpino, con un diferencial de 441 puntos, pese al último repunte. La zona de rescate sigue a la vuelta de la esquina, porque el coste de la financiación de España se mantiene en el 6,45%, cuando Alemania paga el 1,359%.
Los analistas relacionan cada vez más la crisis de la deuda con la desconfianza en el sector bancario, que acumula reforma tras reforma sin ganarse la confianza de los inversores. Tras los dos decretos de febrero y mayo, y el anuncio de las nuevas valoraciones y auditorias a las que se van a someter las entidades, el rescate del grupo BFA-Bankia, y la publicación de unas cuentas revisadas que en nada se parecen a las inicialmente comunicadas, han sembrado nuevas dudas sobre el conjunto del sector.
Algunos reproches formulados a la entidad se extienden a los supervisores. En la presentación de la memoria anual del regulador de los mercados ante la comisión de Economía del Congreso, el presidente Julio Segura justificó que fue precisamente la exigencia de la CNMV de que al menos el 40 % del capital de Bankia estuviera en manos de inversores institucionales lo que rebajó el precio inicial de salida a Bolsa del banco, contra viento y marea, en julio del pasado año. Alegó que esa decisión ha contribuido a reducir las pérdidas que la posterior caída bursátil ha causado a las carteras de los pequeños accionistas. Segura se desmarcó de otras acusaciones. Explicó que el organismo no tiene competencias ni responsabilidades que le permitan conocer si hubo «información falsa o falsedad de datos» en las cuentas de Bankia.