Una familia somalí huye del bastión islamista de Afgoye. :: AFP
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La lucha contra las milicias de Al-Shabab atrapa a 400.000 desplazados en Somalia

A la zona ahora en litigio afluyeron miles de familias que huían de la hambruna en el este y el sur del país

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Las tropas de la Misión de la Unión Africana en Somalia (Amisom) y efectivos del Gobierno somalí prosiguen su avance en el corredor de Afgoye, al noroeste de la capital Mogadiscio. La ofensiva, iniciada el martes de esta semana, pretende hacerse con la población del mismo nombre, bastión de las milicias de Al-Shabab. Los combates tienen lugar en un territorio que concentra el mayor número de desplazados del mundo. Según estimaciones de las agencias humanitarias, unas 400.000 personas sobreviven en este pasillo de unos 30 kilómetros y se encuentran atrapadas en el fuego cruzado.

La retirada de las ONG internacionales de socorro, provocada por la hostilidad de los radicales, impide conocer la situación real de los civiles, aunque fuentes de Reuters advierten de que miles de residentes tratan de huir de la zona de los combates. Fuentes gubernamentales indican que han penetrado diez kilómetros en el territorio y tras controlar la población de Tre Disho, se dirigen hacia las localidades de Elasha y la fortaleza militar de Afgoye, principal objetivo. Los efectivos de la Amisom esperan completar la conquista en un plazo de cuarenta y ocho horas, según declaraciones de su portavoz, el capitán Ndayiragije Come.

La zona en litigio es un área rural a la que afluyeron el pasado año decenas de miles de familias afectadas por la hambruna que asoló el centro y sur del país, regiones prácticamente carentes de toda asistencia exterior. La relativa permeabilidad de los frentes permitía a los desplazados beneficiarse de la atención de las ONG instaladas en la capital. A lo largo de los últimos meses han permanecido alojados en tiendas de campaña improvisadas, aunque la creciente intensidad de los combates en la periferia de Mogadiscio ha provocado nuevos movimientos de población, lo que dificulta o impide su auxilio.

Estrategia coordinada

La campaña en curso se inscribe dentro de una estrategia coordinada entre la Unión Africana, Kenia y Etiopía para combatir a los guerrilleros islamistas, vinculados a Al-Qaida. En agosto de 2011, los 'cascos verdes' tomaron la iniciativa en la capital expulsando a los extremistas del casco urbano y en octubre, el ejército keniano respondió a infiltraciones terroristas en sus 'resorts' turísticos invadiendo el este y sur del país.

Hace tres meses, milicias locales apoyadas por Etiopía tomaron la ciudad de Baidoa, una de las más importantes del sur del territorio. La estrategia última de esta ofensiva parece conseguir la conexión con esta avanzadilla, fragmentando el territorio bajo control de Al-Shabab y fomentando el acoso bélico a través de varios frentes.