El Ibex sigue escarbando en niveles de 2003
La crisis en Grecia inunda de incertidumbre el parqué madrileño y lastra las Bolsas europeas en la apertura
MADRIDActualizado:El día comenzaba con alarma, porque la prima de riesgo de la deuda española escalaba hasta los 507 puntos básicos y el interés del bono alemán a diez años alcanzaba el 6,5%. Por encima de esos fatídicos 500 puntos básicos se mantuvo hasta las diez de la mañana. Entonces comenzó a relajarse, ante el rumor que comenzó a correr en el mercado sobre la posibilidad de que el Banco Central Europeo pudiera adoptar alguna medida para frenar el ataque al euro. Gracias a ese rumor, la prima de riesgo española cerró en los 482 puntos básicos, por debajo de los 487 puntos básicos de la jornada anterior. El interés del bono español a diez años se redujo desde el 6,34% hasta el 6,29%. También se redujo el coste de los seguros contra el impago. La prima de riesgo de Italia, que comenzaba la jornada por encima de los 455 puntos básicos, al término de la sesión se situaba en los 435 puntos básicos.
El selectivo español abrió con fuertes descensos. Al filo de las diez de la mañana marcaba los mínimos de la sesión en los 6.536 puntos, mínimos desde junio del año 2003. Remontó con los rumores alrededor del Banco Central Europeo, aunque sólo entró en números verdes alrededor de las dos de la tarde, que fue cuando tocó máximos del día en los 6.758 puntos. No fue por datos publicados en Europa, sino por los que se conocieron en Estados Unidos. En primer lugar, los inmobiliarios: en abril se iniciaron 717.000 nuevas viviendas en cifra anualizada, por encima de las 685.000 previstas por los analistas. Además, el dato de marzo se revisó al alza. El número de permisos de construcción del mes de abril no alcanzó las previsiones, pero la cifra del mes de marzo se revisó al alza.
Buen dato también de producción industrial: creció un 1,1% en abril, por encima del 0,6% previsto por los analistas. Y el porcentaje de utilización de la capacidad instalada también batió expectativas: saltó del 78,4% hasta el 79,2%, cuando los analistas esperaban que se situara en el 79%.
Pero el Ibex no esperó a la publicación de los datos industriales americanos que se publicaron a las tres y cuarto. A las tres ya estaba en rojo otra vez. El indicador dio un último cambio en los 6.611,50 puntos, lo que supone un recorte del 1,33%. El selectivo sigue escarbando en los niveles de 2003. Tras perder ayer los 6.700 puntos, la siguiente referencia está en los mínimos de ese año, los 5.700 puntos. El índice que más cayó fue el PSI-20 de Lisboa, que se dejó un 1,88%. Mientras, el Ftse 100 británico perdió un 0,60%. El Dax alemán cayó un 0,26% y el Ftse Mib de Milán, un 0,21%. En verde, sólo el Cac 40 francés, que ganó un 0,31%.
Pudo contribuir la decepción que supuso que al final el Banco Central Europeo no hiciera nada, lo que ensombreció las palabras del ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schaeuble, que se mostró partidario de la creación de un Gobierno europeo. O que hiciera lo que nadie esperaba que hiciera. La autoridad monetaria europea decidió disminuir el soporte de liquidez a la banca griega por incumplir los requisitos de recapitalizaión, cuando están al borde del colapso por la fuga de depósitos: sólo el lunes, los griegos retiraron 700 millones de euros en depósitos. Aunque siempre les queda la asistencia de emergencia. Y el BCE, tras el cierre de la sesión, afirmó que la recapitalización de los bancos terminará pronto y que entonces se restaurará el soporte de liquidez que les presta.
Política monetaria
El mercado, muy sensible a todas las noticias que se publican sobre Grecia, reaccionó mal. Y más decepción: el Eurobanco está realizando una revisión sobre sus herramientas de política monetaria, pero admitió que no tiene planes inmediatos, al menos hasta julio, para incrementar los estímulos, pese a las tensiones que se respiran últimamente en los mercados. Según fuentes del Banco Central Europeo, en declaraciones a Bloomberg, la inestailidad del mercado que hay en estos momentos ayuda a que los mandatarios continúen con su programa de reformas.
Otra perla del presidente del BCE, Mario Draghi: el Banco Central Europeo no hará nada que viole sus principios para mantener a Grecia dentro del euro, pese a que el día anterior, en la primera reunión de Angela Merkel y François Hollande, ambos se mostraran partidarios de mantener al país en la Unión Monetaria. Las próximas elecciones del día 17 de junio se han planteado como un referéndum sobre el euro, como Wolfgang Schaeuble. Quizás, de manera falsa, manipulada o intencionada. Para meter miedo a la gente. El líder de Nueva Democracia (conservador), Antonis Samaras, comentó: "Podemos cambiar todo en Grecia, junto con Europa, que está cambiando. O podemos vivir el horror y el aislamiento de una salida del euro y el colapso de todo lo que hemos construido". No hay que olvidar que el partido izquierdista Syriza, favorito en las encuestas, no quiere que Grecia salga del euro, sólo revertir las políticas que están ahogando al país.
Se entiende, pues, que los buenos datos económicos procedentes de Estados Unidos no ayudaran a que los índices europeos, sobre todo los más débiles, se mantuvieran durante mucho tiempo en positivo. Aunque los índices estadounidense sí parecían querer quedarse en positivo.
En el mercado de divisas, el euro se mantuvo en el entorno de 1,273 dólares durante toda la jornada, aunque con oscilaciones: la moneda única llegó a caer por debajo de 1,27 a primera hora de la mañana. Marcó el mínimo de la sesión en 1,2680 dólares. Por otra parte, las referencias procedentes de la zona euro no tenían mucha relevancia: tan sólo la balanza comercial de la zona euro, que tuvo más superávit de lo esperado en marzo.
Mercado español
En el selectivo español, únicamente tres valores cerraron al alza: IAG, que rebotó un 3,04% tras el fuerte descenso de la sesión anterior; el Popular, que se apuntó un 0,60%; mientras que Gamesa ganó un 0,25%. El Sabadell también se salvó de los números rojos, aunque sólo logró terminar en tablas. El selectivo pudo caer más, pero algunos de los grandes valores se situaron entre los que menos cayeron: Telefónica apenas bajó un 0,28%. BBVA retrocedió un 0,41%. Iberdrola, un 0,78% y Repsol YPF, un 1,29%.
En el otro lado de la tabla, Bankia, que se desplomó un 11,12%, en su mayor caída de su corta historia bursátil, hasta 1,66 euros por acción. La entidad sufrió ese fuerte castigo porque avisó de que revisará sus cuentas de 2011 para introducir nuevas provisiones. A continuación, Bankinter, que se dejó un 4,80%. Entre los peores, Red Eléctrica y Sacyr Vallehermoso, que cedieron un 3,32% y un 3,10%, respectivamente. Más constructoras entre los valores más castigados, con Acciona, que perdió un 2,87%, Ferrovial, que se dejó un 2,47%, y OHL, que cayó un 2,38%.
Fuera del Ibex, el peor valor fue Fersa, que cayó un 18,60%. Y otros cuatro perdieron más de un 10%: Ezentis, Bankia, Tavex y Cementos Portland. En positivo, sólo un puñado de valores. Sólo Vértice ganó más que IAG: se apuntó un 3,30%. Miquel y Costas y Reyal Urbis ganaron más de un 2%. Pescanova y Meliá subieron más de un 1%. Cie Automotive y Europac, alrededor de un 0,9%. EADS y Lingotes completaron la lista de valores en verde. En el mercado de materias primas, ligeros recortes para el crudo, así como para el oro y para el cobre.