RECONSTITUYENTES

Este año está de moda hablar de la constituyente pero he de reconocer que me aburre el tema, yo prefiero hablar de reconstituyentes, de grandes reconstituyentes gaditanos. Ahora que está de moda hablar del recorte de los servicios públicos hay grandes servidores públicos que nunca han sufrido recortes... bueno a veces un cortesito por la mitad para compartir, y me refiero a esos reconstituyentes, a esos servidores públicos en forma de bocadillo que sirven para recuperar el cuerpo después de una noche de movimiento.

Uno no sabe si estos bocadillos están condenados a desaparecer porque después de que Jorge Fernández Díaz, el ministro del Interior de Esssspaña, haya redescubierto el toque de queda, ya más que se podrá estar en la calle a partir de las doce para ver El Perdón. Por eso hoy quiero rendir homenaje a tres grandes reconstituyentes gaditanos: el Pepito del Bar Lucero, el Africano del Bar Francis y el bocadillo de lomo en manteca de la Venta Pinto de Vejer.

Cuantos cuerpos hechos una porquería han reconstituido esos bocadillos. Pero es comprensible que eso te reconstituya. Tu imaginaté que vienes hecho polvo con el estómago haciendo más gorgoritos que la fábrica de La Casera. Hay un momento clave y es cuando uno coge el pan con las dos manos con más ansiedad que Messi tirando un penalti, lo estruja y suena ese cucurruíto que es como si la filarmónica de Viena (ninguna podría interpretarlo mejor) tocara a cuchillo jamonero.

Ese sonar del pan crujientito es el primer momento memorable. Ya cuando el bocadillo se acerca a la boca hay confianza, se ha roto el hielo...bueno el hielo y un poquito de la corteza del pan. Fijensé en la cara de alguien después de darle el primer bocao a un bocadillo reconstituyente. El blanquito que traía se le vuelve tecnicolor con rapidez. Parece como si la manteca colorá del lomo o del Pepito o la mijita del mojo colorado del africano le tintaran la cara al sujeto.

Es cierto que hay un momento de duda con estos bocadillos. Para que de verdad sean reconstituyentes ¿Se deben tomar con café, con colacao o con otra cerveza? por aquello de que la ruptura con la noche no sea demasiado abrupta.

Sería necesario hacer una instancia al ministro del Interior, mandarle incluso una caja de Pepitos de lomo del Bar Lucero para que sepa lo que se podría perder si sigue con lo del toque de queda. Aunque cualquiera sabe, lo mismo abre el bocadillo, ve la manteca colorá, le da un otrosí, y hace otro decreto para que a partir de ahora la manteca colorá sea azul... como Endesa.