Zúñiga lidera la remontada de la salvación en el Barbadillo

Se daban los ingredientes para una gran mañana de fútbol. La fiesta se respiraba en un ambiente bastante caldeado, ya que el termómetro superaba los 35 grados. El Arcos se enfrentaba a un partido trascendental en el que seguir adelante con el sueño de permanecer en categoría nacional y, por ello, sus jóvenes futbolistas no podían fallar a un millar de aficionados que los empujaron a la victoria. Y no lo hicieron, aunque no fue un camino de rosas.

Los nervios de los pupilos de Carlos Fontana e Ismael Pérez fueron la tónica predominante del inicio del encuentro. Los de la Ciudad Monumental no encontraban su sitio sobre el tapete y el Alcalá demostró por qué es un equipo de la parte alta de la clasificación. En los primeros compases, Gonzalo, en el minuto 5, metió el miedo a la hinchada local con un remate de cabeza que se fue por poco y la movilidad de Luis traía de cabeza a la defensa blanca. En el minuto 23 fue este último quien superó a Leñero tras un centro raso que recibió de la derecha, adelantando a los sevillanos.

El jarro de agua fría hizo temer a los arcenses que, pese a que en ese momento le favorecían los resultados de sus rivales directos, se veía en ese momento en la andaluza. Las jugadas no salían y el Arcos comenzó a tirar, de manera peligrosa, de los balones largos. La movilidad de Ciri, que terminó exhausto, fue fundamental para tratar de crear algo de peligro. No obstante, el equipo echaba en falta en ese momento a Biri, que se cayó del once titular a última hora por lesión.

El equipo no encontraba la forma de llevar peligro y apareció el de siempre, el capitán Dani Zúñiga. El arcense comenzó a probar su disparo desde fuera del área y eso ayudó a dar aliento a un equipo que lo necesitaba. En el 36 estuvo a punto de meter un disparo desde casi 40 metros, lo detuvo el portero y el rechace cayó en los pies de César que disparó centrado, a las manos de Guille. Un minuto después, Ciri remató un centro que venía de la banda izquierda y estableció la igualada.

Los minutos de oro de los arcenses se completaron en el 39 cuando Zúñiga robó un balón en la frontal del área, regateó a un contrario y se plantó delante del portero, superándolo con un disparo entre sus piernas. El delirio se había apoderado del Barbadillo y el equipo apretaba buscando el tercero. Y pudo llegar también de las botas de Dani, que tras un pase medido de Zurdo lanzó un tiro potente desde la frontal que sacó bajo palos Paco.

La segunda parte comenzó igual que la primera, con el Arcos buscando el terco que pudo llegar de la cabeza de Ciri primero o de la de Zúñiga después, en una jugada con doble remate nada más iniciarse la segunda parte. El Alcalá no quería ser un convidado de piedra y en el 54 y el 56 estuvo a punto de poner la igualada, que evitó Leñero, e incluso en el 65 Gonzalo estrelló un balón en el larguero. Minutos después los de Sevilla comenzaron a apretar y el Arcos pasó unos malos momentos que se disiparon en el 84 cuando tras una buena contra de los blancos, Pedro quedó con un buen balón en la frontal del área y dio un pase generoso a César, que entraba por su izquierda, que solo tuvo que empujar. Ahí se desató el delirio en el Barbadillo, que siguió con una explosión de júbilo de los jugadores cuando el árbitro pitó el final del partido.