«Hay que aguantar con la cabeza alta este ratito»

En apenas cinco años de carrera, la cantante Conchita ha tenido que aprender a sujetar los pies en el suelo en el éxito y a recomponerse cuando los proyectos no alcanzan las expectativas soñadas. Que las carreras largas significan volver a empezar a diario. Su debut, con el álbum 'Nada más' en 2007, experimentó una acogida abrumadora: Premio de la Música al Artista Revelación y al Autor Revelación por la canción 'Nada que perder', disco de platino y más de 70 semanas en listas. Pero la fórmula mágica no se repitió en 2009 con su segundo disco, '4.000 palabras'.

“No me dio tiempo de asimilar lo que me había pasado con el primer disco, de poner los pies sobre la tierra. Además, entre el primero y el segundo pasó poco tiempo y sentí que había que parar un poco para componer, para que me pasasen cosas y poder escribir sobre ellas”, explica la artista, que se ha mostrado encantada con el resultado de su nuevo trabajo. "A la tercera va la vencida, dicen. Y es justo lo que quería hacer, además, noto un buen feedback por el momento", asegura la cantante y compositora.

Su nueva apuesta destila el tono tierno y melancólico que definen su estilo, aunque aderezado con grandes dosis de positivismo y fortaleza, en una suerte de reafirmación como artista que no se resigna a lidiar ni con la exclavitud de las cifras ni con el poso de pesimismo que genera el contexto de crisis económica. "Todos tenemos en mente que la cosa no va muy bien y que hay que seguir con la cabeza alta este ratito. El que sobreviva, ahí se quedará", reflexiona la artista.