Basagoiti da por roto el pacto de gobierno con Patxi López
El popular dice que «carece de lógica» que el lehendakari siga gobernando y este le acusa de obedecer al Ejecutivo central
BILBAO. Actualizado: GuardarEra la crónica de una muerte anunciada. La de un pacto suscrito en marzo de 2009 que agonizaba desde hacía meses. El acta de defunción la firmó ayer Antonio Basagoiti al reclamar un adelanto electoral para después del verano debido a que la alianza entre el PSE y el PP vasco está «agotada» y que «cada día carece de más lógica el que Patxi López siga gobernando». Fue el estallido de una crisis que casi todo el mundo preveía pero que los socialistas -y algunos populares- no esperaban tan pronto. Las consecuencias están por ver. Por ahora no se prevén demasiadas. El Gobierno vasco apostó por no modificar su hoja de ruta e insistir en que agotará la legislatura, que concluye en febrero del año que viene. El lehendakari comparecerá hoy de forma solemne tras el consejo de gobierno. La rueda de prensa estaba diseñada para que López valorase su paso por Ajuria Enea, pero Basagoiti modificó ayer el guion.
Porque la declaración del presidente del PP vasco se produjo un día muy simbólico: justo tres años después de que el líder del PSE tomase posesión de su cargo como lehendakari. López se colocaba al frente del Gobierno vasco gracias al acuerdo de 'Bases para el cambio democrático al servicio de la sociedad vasca' firmado con el PP y al apoyo de Basagoiti, convertido desde entonces en su «socio preferente». Pero ahora «cada día es más difícil alcanzar esos puntos de encuentro», aseguró ayer el presidente de los populares vascos en ABC Punto Radio.
Desde hacía meses, la distancia entre las dos formaciones era cada vez más evidente, sobre todo a raíz de la llegada de Mariano Rajoy a la Moncloa. Había discrepancias a la hora de analizar los ritmos a seguir tras el anuncio de ETA del pasado 20 de octubre, pero no de fondo. De hecho, López alabó la semana pasada el plan de reinserción de presos etarras presentado por el Ministerio del Interior. El detonante de la explosión ha sido la economía.
El lehendakari no ha ahorrado críticas hacia los recortes planteados por Rajoy, sobre todo en áreas como la educación o la sanidad. Con un claro discurso de izquierdas, López ha insistido en las últimas semanas en que recurriría a la Justicia si creía que era vulnerado el autogobierno, una postura que alcanzó su cénit el pasado viernes cuando anunció desde la tribuna del Parlamento su intención de acudir al Tribunal Constitucional. Lo hizo, además, solo 24 horas después de que los socialistas y el PNV sacasen adelante una resolución contra los ajustes de Rajoy que dejó en una evidente soledad al PP vasco. «Hemos llegado a un momento en que el Gobierno plantea permanentemente iniciativas que agreden al que le apoya», afirmó ayer Basagoiti. El líder de los populares fue rotundo: «el pescado está practicamente vendido». Con matices, sus reflexiones eran similares a las expresadas por Jesús Eguiguren y Odón Elorza, con la diferencia de que mientras estos dos son 'versos sueltos' dentro del PSE, Basagoiti es el máximo responsable del PP. Su anuncio, realizado poco después de las nueve de la mañana, cogió con el pie cambiado a los socialistas e incluso a varios dirigentes del PP vasco, que no estaban al tanto de lo que pensaba decir Basagoiti. La respuesta oficial del Gobierno llegó al mediodía a través de una breve nota oficial en la que se acusa al presidente de los populares en Euskadi de hacer «seguidismo de los recortes y las políticas» de Rajoy «antes que defender el autogobierno y los intereses de la ciudadanía vasca». Asimismo, se recalcaba que el «pacto por el cambio» no contemplaba «el debilitamiento de nuestro autogobierno ni el desmontaje de los servicios fundamentales del Estado de bienestar».
La pregunta es ¿y ahora qué? En principio, el Gobierno vasco quiere que el panorama no cambie demasiado e insiste en que seguirá defendiendo el autogobierno y rechazará las políticas de Rajoy. A la espera de lo que hoy explique López, fuentes del Ejecutivo resaltaron que en su agenda no entra el adelanto electoral ni la moción de confianza ya requerida por el PNV. Si alguien cree que el actual Ejecutivo no tiene razón de ser, que registre una moción de censura, se subraya desde la presidencia del Gobierno vasco. Se trata de un trámite parlamentario que obligaría a PNV y PP a presentar un candidato alternativo a lehendakari, algo inviable a día de hoy.
La izquierda abertzale tampoco tardó en reaccionar exigiendo el adelanto electoral con miras a ocupar nuevas cotas de poder. En cualquier caso, la pretensión del Gobierno de agotar su mandato tiene por delante numerosos obstáculos.