Las empresas reclaman al Gobierno medidas para evitar más expropiaciones

Los empresarios reclaman al Gobierno medidas «drásticas» para evitar que se extiendan las expropiaciones a compañías españolas en Iberoamérica. El vicepresidente primero de la CEOE, Arturo Fernández, cree que es necesaria una respuesta «más contundente y rotunda» ante la segunda nacionalización en apenas quince días de una filial de empresa española.

«Esto puede ser contagioso», señaló el vicepresidente de la patronal, «luego podrían venir otros países, como Ecuador o Venezuela». Precisamente en el último informe sobre Inversión Española en Latinoamérica realizado por el Instituto de Empresa, las empresas destacaban como una de las principales amenazas para sus inversiones la inseguridad jurídica en Argentina, Bolivia, Venezuela y Ecuador.

Algo de esta inseguridad tiene que ver también con la debilidad internacional de España, más volcada en la consolidación de las cuentas públicas y cuando la polémica de nuevo envuelve a la Casa Real con el 'caso Urdangarín'. «Yo no veo que esto les suceda a los franceses o alemanes», dijo el vicepresidente de los empresarios en declaraciones a Televisión Española. Para Fernández, con una segunda expropiación en marcha «las medidas deben ser más drásticas» porque «hemos invertido mucho dinero y trabajo» para que ahora «nos traten de esta manera».

Nadie se plantea que Bolivia dé marcha atrás a la expropiación de la filial de Red Eléctrica (REE), cuyo decreto ya firmó el presidente Evo Morales tras mandar al Ejército a las instalaciones de Transportadora de Electricidad. REE «respeta» la decisión soberana del Gobierno boliviano «siempre que el proceso responda a los principios internacionales de derecho». La empresa española confía en llegar a un acuerdo para una compensación adecuada. En este sentido, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, anunció ayer, antes de entrar a la reunión del Ecofin que se celebra en Bruselas, que el Gobierno español «vigilará» que Bolivia pague un «justiprecio» por la expropiación. La «negociación» y la «diplomacia activa» es lo que reclaman desde el PSOE al Gobierno. El exministro socialista Jesús Caldera dijo que Bolivia «puede ejercer su derecho como considere oportuno», aunque eso sí «salvando la justa indemnización».

Al argumento de Evo Morales de que expropiaba la filial ante la baja inversión que realizaba la empresa española en su país, Red Eléctrica señala que ha invertido en el país andino más de 74 millones de dólares entre 2002 y 2011, a los que añade otros 14 millones de dólares destinados a proyectos ya iniciados, lo que da una cifra total de 88 millones de dólares. Si esta es la cifra final que reclamará la empresa a Bolivia, supondría más de 66 millones de euros. La empresa que preside el exsecretario de Estado de Energía con Aznar, José Folgado, recalca que ha invertido prácticamente la misma cantidad que pagó por la empresa: 91 millones de dólares.

A tenor de las declaraciones del ministro boliviano de Hidrocarburos, Juan José Sosa, sí habrá negociación con Red Eléctrica para pagarle una compensación. Sosa le comunicó por teléfono al ministro de Industria español, José Manuel Soria, que hablarán con la empresa española para reconocer sus inversiones que, como dice el decreto de expropiación, serán evaluadas por una empresa independiente.

En una jornada negra para la Bolsa, Red Eléctrica cerró con caída del 2,24%. La compañía recalcó en una nota a la CNMV que Bolivia «no tiene un efecto relevante en los negocios ni en la cuenta de resultados del grupo». De hecho, sólo representa un 1,5% de la cifra de negocios.

La Comisión Europea se ha mostrado «preocupada» por la expropiación de la filial boliviana de Red Eléctrica porque considera que manda una «señal negativa» a los inversores internacionales sobre el clima de negocios en Bolivia. Sin embargo, también ha resaltado que este caso «no es comparable» a la expropiación de YPF. En el Congreso de los Diputados argentino se veía ayer el proyecto de ley de expropiación del 51% de las acciones de Repsol en la petrolera YPF.