Los testigos aseguran que Urdangarin controlaba las cuentas de Nóos
BARCELONA. Actualizado: GuardarLas comparecencias de empleados y proveedores del Instituto Nóos ante el juez José Castro, en el marco de las investigaciones del caso Palma Arena, volvieron a poner en entredicho ayer al duque de Palma al afirmar que su labor al frente de la entidad sin ánimo de lucro se limitaba a labores de mera representación y que su vinculación con la entidad acabó en el mes de marzo de 2006, cuando se lo pidió la Casa Real. Así, tal y como declaró Sergio Fernández, empresario y proveedor del Instituto Nóos, Iñaki Urdangarin firmaba los cheques de la sociedad y por tanto sus actuaciones no se circunscribían a las relaciones institucionales, como siempre ha mantenido en sus declaraciones, en las que ha cargado sobre su socio Diego Torres la responsabilidad de las actividades económicas de la fundación y la gestión del día a día, de la que él siempre ha asegurado que se mantenía al margen.
Además, María Teresa Zazo, la administrativa que coordinaba la oficina en la que trabajaban Diego Torres e Iñaki Urdangarin, testificó este viernes que ambos mandaban por igual en Nóos, como expresaron buena parte de los testigos el jueves. Y no solo eso, sino que también estaban al frente de la entidad sin ánimo de lucro que promovieron ambos, la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social, sociedad creada a finales del año 2006 después de que la Casa Real indicara a Urdangarin que debía abandonar sus negocios al frente de Nóos y que habría servido para dar continuidad a la labor que venían desarrollando y que al parecer habría sido utilizada para la evasión de capitales.
Declaración delicada
Al cierre de esta edición, aún quedaba por finalizar la declaración del testimonio más relevante del día, el de Julita Cuquerella Gamboa, asistente personal de Urdangarin, autora del famoso 'post-it' en el que se apunta la existencia de una cuenta en Suiza y cuyo nombre figura en varios correos electrónicos incluidos en el sumario, en uno de los cuales queda reflejada la búsqueda de trabajadores ficticios con el objetivo de obtener beneficios fiscales para el entramado societario de Urdangarin y Torres.
La ronda de declaraciones en la capital catalana concluirá hoy con la citación de 14 testigos, entre ellos la exconsejera de Salud de la Generalitat catalana, Marina Geli.