Nadal impone su ley ante Kukushkin

En un contexto marcado por la amenaza de lluvia y de suspensión del choque por falta de luz – la central del Montecarlo Country Club no tiene iluminación artificial-, Rafael Nadal decidió que no era el día para andarse con rodeos. Arrollador desde el fondo de la pista y entonado en cada golpe, el tenista español completó uno de esos partidos en los que le sale todo lo que se proponga; uno de esos en los que el rival podría estar jugando horas y horas y sería incapaz de parar la avalancha del manacorense.

Porque este jueves, a diferencia de su partido ante Nieminen, sí que jugó largo, sí que tuvo confianza y empujó tanto con la derecha como con el revés. Por ello, en apenas 59 minutos de encuentro, el de Manacor se deshizo del jugador de origen ruso por 6-1 y 6-1, consiguió su victoria número 41 en el torneo de Montecarlo y se clasificó para cuartos de final, donde se verá las caras con el ganador del duelo entre Almagro y Wawrinka.

“He jugado mucho mejor hoy que ayer. Desde el comienzo me he notado mejor, he conseguido jugar más delante, más metido en la pista. He empezado tirando bolas largas y he estado muy sólido en todo momento”, explicó el siete veces campeón en Montecarlo a las cámaras de TVE.

El primer set fue coser y cantar. Nadal, que aprovechó las tres oportunidades de rotura que tuvo en el acto inicial, fue muy superior a Kukushkin. Con tiros mucho más profundos que el día anterior, los juegos iban cayendo uno tras otro en medio del vendaval del balear.

Por si no era suficiente el gran juego del español, el jugador nacionalizado kazajo se empeñó en ponerle las cosas fáciles ganando únicamente el 31% de los puntos con su primer servicio, un auténtico suicidio ante el número dos del mundo.

Las facilidades que dio Kukushkin en el primer parcial se repitieron en el segundo set. Y Nadal, que no quería que se parase el encuentro, y así evitar jugar dos partidos este viernes, puso la directa y arrolló a su rival en un encuentro en el que se volvió a rencontrar con su servicio: “He sacado muy bien, mucho mejor que ayer”, aseguró.

En una jornada protagonizada por la emotiva victoria de Djokovic sobre Dolgopolov el mismo día en el que falleció su abuelo, un encuentro que el serbio comenzó y terminó visiblemente emocionado, Nadal valoró la grandeza del serbio: “Cuando se ha parado el partido por lluvia he ido a darle un abrazo y a darle ánimos. Ha hecho un partido digno de admiración con la mala noticia que se ha levantado. Poder ganar el partido es señal de su fuerza mental”l.