PP y PSOE mantienen un silencio prudente ante la salida de la edil de Alcalá

La salida de la concejala del Partido Popular, Estela Sánchez, del Ayuntamiento de Alcalá de los Gazules ha generado un silencio prudencial entre los máximos dirigentes políticos de la provincia, tanto del Partido Popular como del Partido Socialista. El presidente de los populares en Cádiz, José Loaiza, afirmó que pese a que varias fuentes han confirmado la renuncia de Sánchez como delegada de Educación y Fiestas «todavía no hay nada oficial» por lo que evitó pronunciarse sobre una decisión que le podría costar la Alcaldía al Partido Popular.

Por su parte, el secretario provincial del PSOE, Francisco González Cabaña, afirmó que se trata de un «problema interno del PP» y que solo a ellos «le corresponde arreglarlo». Aun así, reconoció que el pacto entre los cuatro concejales del PP con los tres de Izquierda Unida para arrebatarle la Alcaldía al PSOE que consiguió seis ediles «fue algo extraño» porque se alió «la derecha más dura con la izquierda del PSOE, que se supone que es IU».

Desde el grupo municipal del PSOE en Alcalá de los Gazules insistieron en que no negociarán con Estela Sánchez si finalmente pasa a estar en el grupo mixto ni presentarán moción de censura, pese a que eso les devolvería al gobierno, «para demostrar que ellos sí que respetan las reglas del juego democrático».

Este periódico intentó ponerse de nuevo en contacto tanto con la concejala Estela Sánchez como con el alcalde de Alcalá, Julio Toscano, sin encontrar de nuevo contestación. Ninguno de los dos han realizado declaraciones al respecto.