Marlango se da un baño de optimismo
La banda de Leonor Watling publica 'Un día extraordinario', su disco más luminoso
MADRIDActualizado:Marlango publica el martes 'Un día extraordinario' (Universal Music), su nuevo álbum de estudio. Grabado en los estudios Cata de Madrid, el trío compuesto por Leonor Watling (vocalista), Alejandro Pelayo (piano) y Óscar Ybarra (trompeta) ha contado con la ayuda del productor Suso Sáiz para dar forma a los diez temas de un álbum que derrocha alegría, optimismo y vitalidad, tres elementos que parecen ir a contracorriente de los turbulentos tiempos que corren.
El mundo está a punto de zozobrar, o eso parece. Y ante esta situación, la banda liderada por Leonor Watling opta por darse un baño de felicidad, completando así una evolución que ya apuntó en su anterior trabajo, 'Life in the Treehouse', hacia letras y melodías de espíritu más luminoso. "Creo que precisamente porque se hunden los barcos y porque la situación está como está, con la que está cayendo, sin ser naïf, lo que nos toca es celebrar lo que tengamos", apunta la vocalista.
Tras cuatro discos en inglés, Marlango cambia de idioma. "Más que una decisión, son las canciones las que nos llevaron al castellano", apunta el pianista Alejandro Pelayo, responsable junto a Leonor Watling de la composición de los temas. "Siempre convivieron desde el primer disco el castellano y el inglés en igualdad de condiciones, pero el inglés se impuso de una manera natural. Ahora, después de todas las versiones que hemos hecho en castellano, se ha impuesto este idioma, pero no por una decisión previa", agrega.
Eso no significa que el giro haya resultado fácil. "Esa primera decisión no tomada nos ha obligado a trabajar mucho y a tomar otras, a tener que prestar mucha atención a la estructura, a las métricas. Es un idioma mucho más exigente que el inglés a la hora de estructurar una canción", subraya Pelayo. En cualquier caso, se les nota satisfechos con el paso dado. "Ojalá de alguna manera nos pase algo nuevo y distinto con estas canciones porque una de las cosas que nos llevó a hacer este disco así era la huida y la búsqueda de algo no conocido", explica el pianista. "No queríamos hacer este álbum recurriendo a ninguna herramienta ya conocida. El cambio de idioma nos ha facilitado mucho eso pero ahora, cuando vayamos al escenario, intentaremos ser lo más aleatorios posible. Que nos pase lo que nos tenga que pasar con las canciones. Y guardar todo lo que aprendamos para el futuro", añade.
Regalos envenenados
'Exquisita', 'Si yo fuera otra' o 'Bocas prestadas' son algunas de las canciones que dejan claro que los componentes de Marlango ha perdido los pudores que pudieran albergar. El jazz y los aires cabareteros siguen estando presentes pero su abanico de influencias es muy amplio y si bien siempre tendrán en mente a Tom Waits tampoco pierden de vista el rico cancionero hispano. "Nos gusta mucho gente que hace canciones en castellano, desde José Alfredo Jiménez y Chavela Vargas hasta Bunbury, De Pedro, Xoel López o Iván Ferreiro", indica Alejandro Pelayo.
Aunque probablemente quien más haya marcado 'Un día extraordinario' sea el argentino Fito Páez. Acostumbrada a los tonos graves y medios, Leonor Watling se atreve por primera vez con el falsete en 'Dame la razón' o en 'Bailando sin querer llegar'. "La manera de cantar cambia con los años, con las experiencias que tienes, con las canciones", explica la vocalista. "Haber tenido la suerte de que Fito nos invitara a colaborar con él e interpretar 'Pétalo de sal', que me obligó a cantar en falsete, una cosa que nunca había hecho, nos hizo darnos cuenta de que era todo un mundo sonoro que no habíamos investigado en Marlango", añade la madrileña.
'Dame la razón', el primer single, es, según se encarga de subrayar Leonor Watling, la canción "que representa un poquito a todas las demás". "Dame un regalo envenenado", entona la actriz de 'Hable con ella' en dicho tema. Y más de uno de esos le han dado a Marlango desde que allá por 2002 iniciasen su aventura. "Nos han pasado muchas cosas que nos han descolocado para bien y para mal, en el sentido de que no sabes lo que hay que hacer con todo eso y vas buscando las canciones que te puedan ayudar a ordenar y que te puedan volver a colocar en lo que consideras que es una senda adecuada cuando en realidad, a veces, estás al borde del abismo", explica Alejandro Pelayo, que compara el sentimiento que se tiene al escribir canciones con lo que experimenta un funambulista, siempre "haciendo equilibrios entre la esperanza y la desolación, entre la locura y el optimismo". Un movimiento en la cuerda que es el que lleva también, como hace Marlango en este disco, a "decidir festejar cuando el mundo se acaba". Aunque, matiza Leonor, "las cosas podrían ir mucho mejor, pero también podrían ir mucho peor”.
Gira
Tras el lanzamiento del álbum, Marlango se echará inmediatamente a la carretera. El 11 de mayo estarán en Barcelona, primera parada de una gira que ya tiene confirmadas fechas también en Sevilla (25 de mayo), Gijón (8 de junio), Santander (9 de junio), San Sebastián (13 de junio), Madrid (15 de junio), La Coruña (16 de junio) y Bilbao (21 de junio).
Y para el futuro, nada de planes concretos, solo un insobornable espíritu de libertad y una férrea decisión de huir de cualquier tipo de encasillamiento. "No queremos hacer nada precisamente para poder hacer lo que nos dé la gana", remarca Alejandro Pelayo. "No tenemos que rendirle cuentas a nadie y ojalá siga siendo así", añade. Así que, quien sabe, el próximo disco podría ser en inglés, en castellano o una mezcla entre ambos idiomas. "Estamos absolutamente abiertos a la sorpresa. Lo que no nos podemos permitir, después de cinco discos y diez años juntos es repetir y recurrir a lugares comunes o a cosas que sabemos que no funcionan porque nos hacemos trampa", concluye.