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El orgullo del vino como patrimonio
Esta iniciativa empresarial es una de las que han recibido ayudas para mantener el sector agroalimentario tras el cierre de la azucarera Apoyo de la Junta a las bodegas Luis Pérez, productoras de excelentes tintos «de autor»
JEREZ. Actualizado: GuardarEl proyecto con el que siempre soñó Luis Pérez, catedrático de la UCA y autoridad en todo lo que se refiere a vinos, es ya una realidad tangible. La bodega que lleva su nombre crea unos vinos excelentes que agotan su producción de alrededor de 50.000 botellas (serán casi el doble con las nuevas instalaciones) casi antes de que acaben su periodo de crianza, sus marcas (como Garum o Samaruco) son ya un referente de los tintos de más alta gama, y su apuesta no ha perdido el toque artesanal sino que es precisamente el corazón que mueve a su empresa familiar.
Hoy en día las bodegas Luis Pérez, que su propietario gestiona junto a sus hijos, son el vivo ejemplo de que la calidad debe ser el principal argumento para sacar adelante un proyecto que, como explicaba ayer el bodeguero, es solo un paso más en su objetivo, casi su ilusión, de «hacer ver sobre todo a los jerezanos y a todo el Marco que el vino es un patrimonio local del que hay que estar orgulloso, un valor cultural reivindicable y un producto cargado de liturgia que debe seducirnos desde el mismo entorno».
Por ese motivo, el principal -y pretendidamente reducido- mercado de esta empresa en la que «prima más el concepto emocional que el económico» es el local, el de la provincia de Cádiz y otras cercanas como Sevilla o Córdoba, aunque también estén recibiendo ofertas de compradores internacionales más que interesados por sus excelentes tintos «de autor».
Y precisamente para dar su apoyo a la empresa Tecnología y Desarrollo Agroalimentario -bodegas Luis Pérez es su nombre comercial-, la directora general de Industrias y Calidad Agroalimentaria de la Consejería de Agricultura, Ana Romero, visitó ayer sus instalaciones, donde tuvo como anfitriones a Luis Pérez y sus hijos.
La intención de este encuentro era ni más ni menos que el de conocer «el estado de este proyecto dirigido a la producción de vino tinto andaluz, un sector que ha experimentado un crecimiento notable en los últimos años y que actualmente ronda el 10% de la producción vínica total de nuestra comunidad autónoma», como recalcó la directora general.
Tras conocer este ambicioso y cuidado proyecto, Romero no pudo menos que alabar la inversión de estos empresarios «que han apostado por la producción de vinos tintos de alta calidad como vía para lograr la dinamización de la economía local», una iniciativa que contribuye a la diversificación de la tradicional oferta vínica de Andalucía y al mantenimiento de la población de esta zona afectada por la reestructuración del sector azucarero tras la reforma de la Organización Mundial del Mercado (OCM) de este producto en 2006.
Precisamente por todos esos motivos esta iniciativa empresarial ha contado con el respaldo de la Consejería de Agricultura a través de la concesión de una subvención de cerca de 800.000 euros relativa a una inversión aprobada de casi 2,3 millones de euros realizada por la empresa, «un apoyo económico que se enmarca en la línea de ayudas dirigida a potenciar la puesta en marcha de proyectos de transformación y comercialización de productos agrícolas en municipios afectados por la citada reconversión y el cierre de fábricas -como la de Guadalcacín-».
Además, la directora puso ayer en valor que esta firma concentre diversas actividades con el fin de hacerse cargo de la totalidad del proceso de producción del vino, desde el cultivo de la uva hasta el embotellado del producto final, una actuación de gran valía para las zonas rurales andaluzas al incidir en la «generación de valor añadido para los territorios donde se encuentran ubicadas las empresas».
No en vano, la ayuda concedida por la Consejería a esta empresa se ha dirigido a la construcción de una bodega para vinos tintos de calidad que incluye lagar, depósitos de fermentación, crianza, embotellado y reposo en botelleros.
Pero tampoco quiso olvidar que esta bodega cultiva directamente más de 12 hectáreas de viñedo donde se encuentran uvas de las variedades syrah, tempranillo, merlot, cabernet sauvignon y petit verdot.