Una familia pierde su casa por cada diez nuevas hipotecas que se firman

La contratación de nuevas hipotecas no deja de caer en picado, mientras el número de desahucios por impago de los créditos hipotecarios se mantiene estable en lo más alto (alrededor de unos 2.000 casos al año). La cifra de desalojos apenas ha sufrido variaciones en los dos últimos años, aunque sí ha experimentado un leve descenso lógico dada la caída en las ventas del mercado inmobiliario.

En el conjunto de 2011, un total de 1.973 familias gaditanas perdieron sus viviendas por no hacer frente a las mensualidades, bien sea porque no pudieron afrontarlos o porque no quisieron. Es decir, se produjeron en la provincia algo más de cinco desahucios al día según la última estadística sobre el efecto de la crisis en la justicia que elabora el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), hechas públicas ahora.

Mientras, en 2011, los bancos y cajas de ahorros apenas firmaron 17.873 nuevos créditos hipotecarios en Cádiz para financiar la compra de fincas urbanas (de las cuales 12.017, iban destinadas a viviendas), un 20% menos que un año anterior. El batacazo es monumental cuando se echa la vista atrás al comienzo de la crisis: en 2007, cuando la burbuja inmobiliaria estalló, los gaditanos firmaron 48.161 hipotecas para fincas en suelo urbano. Ese mismo año, los bancos llevaron ante los tribunales a un total de 668 familias por impagos. La cifra se multiplicó por dos al año siguiente, hasta superar los 2.100 casos en el 2009, el peor en número de desahucios. Desde entonces hasta ahora, el descenso de casos ha sido ínfimo: hubo 1.994 familias afectadas por los desalojos en 2010 y los ya citados 1.973 casos el pasado año.

El informe sobre los efectos de la crisis del CGPJ indica que Cádiz es la cuarta provincia de Andalucía en número de ejecuciones hipotecarias, por detrás como es lógico de Málaga (3.633 casos) y Sevilla (3.150 casos). Pero curiosamente, también supera a Cádiz en estas ominosas estadísticas la provincia de Almería: con 2.716 familias desalojadas de sus viviendas durante todo el año 2011.

El mayor de los dramas, en todo caso, no es solo la pérdida de las viviendas. Muchos propietarios mantienen aún deudas por saldar con los bancos una vez que entregan su viviendas como garantía de la hipoteca. Como solución, el Gobierno central aprobó a comienzos de marzo un catálogo de buenas maneras y beneficios fiscales para las entidades bancarias que permitirá la dación de las vivienda como pago a las hipotecas. A esta alternativa, sin embargo, solo se pueden sumar familias en riesgo de exclusión social, en las que todos sus miembros estén sin empleo, y además la adhesión de los bancos no es obligatoria.

Lanzamientos judiciales

El estudio del Poder Judicial sobre los efectos de la crisis también incluye el número de 'lanzamientos' ordenados por los jueces ha ido en aumento en los últimos cuatro años. También en 2011 con respecto al año anterior. Los lanzamientos se corresponden con los desalojos forzosos que llevan delegaciones judiciales y agentes de la Policía cuando se los dueños no abandonan sus casas de manera voluntaria dentro del plazo.

Con todo, estos lanzamientos no se corresponden solo con los impagos de hipotecas. Muchos también van dirigidos a inquilinos de viviendas en alquiler que incumplen sus obligaciones mensuales. También víctimas, al fin y al cabo, de la crisis económica.

En concreto, los jueces gaditanos dictaron a lo largo de 2011 un total de 1.337 lanzamientos, 320 más que un año antes y suponen más del doble de desalojos llevados a cabo en 2009. A pesar de que aquel año España vivía ya inmersa en la crisis, apenas hubo 665 órdenes de desalojo forzoso.