Lombán continúa con su renovación aparcada

David Lombán continúa sin querer hablar de su renovación. El central del Xerez acaba contrato el 30 de junio y cada vez parece más complicado que pueda continuar alguna temporada más vinculado al conjunto jerezano. Emilio Viqueira trató de iniciar las conversaciones a comienzos de temporada, pero al ver que ni Lombán ni su representante estaban por la labor, todo se quedó en un segundo plano.

Y ahí sigue, en un segundo plano, aparcada, pues ni el futbolista quiere hablar del tema ni la dirección deportiva está en estos momentos en disposición de negociar nada de cara a una próxima campaña cargada de incertidumbre. De hecho, Emilio Viqueira continúa realizando su trabajo de seguimiento a jugadores, pero no puede dar ningún paso pues a día de hoy es una interrogante quien tomará las riendas del club cuando los administradores concursales devuelvan los poderes de gestión al consejo de administración.

Ayer se le preguntó a Lombán sobre el asunto, pero comentó que «no hay ninguna novedad. Todo sigue igual que hace tiempo. Como dije hace unas semanas, el objetivo del equipo todavía no está cumplido y no es lo que más me preocupa ahora mismo. Para nada». Eso sí, aclaró que los problemas institucionales que está sufriendo la entidad no influirán a la hora de tomar una decisión sobre su futuro: «No me afectarán. Nosotros hemos intentado aislarnos un poco de todo eso y en mí no pesaría eso porque este es mi segundo año aquí y tengo en cuenta otras muchas más cosas antes que eso. Pienso que estoy muy a gusto, he tenido la oportunidad de tener la confianza del entrenador, de jugar casi todos los partidos y tanto en el club como en la ciudad me han tratado bien y me he adaptado rapidísimo. Lo menos importante sería el problema institucional». Esto no quiere decir que le dé igual quien esté al frente de la nave azulina, pues afirma que los jugadores quieren una «estabilidad en el club. Está claro que los que entraron no tenían ninguna estabilidad en cuanto a sus ideas y lo que ofrecían, pero creo que ahora todo está mucho más estable. Por lo menos eso es lo que nos trasmiten a nosotros».

En el apartado estrictamente deportivo, la llegada de Moreno al banquillo ha afectado directamente a David. Ni mucho menos ha perdido protagonismo en las alineaciones, pero sí que se ha producido un pequeño matiz en su posición. Ha cambiado el central derecho por el izquierdo. El defensa explica que con Moreno ha jugado de central izquierdo «desde el primer partido. Solo en un encuentro he jugado de central derecho, que fue contra el Murcia, pero los demás han sido de central izquierdo. El primero fue con Gerard, que creo que se siente más cómodo en la derecha. De todas formas fue una decisión de Moreno porque yo venía jugando tanto la temporada pasada como en el arranque de esta en la derecha. Cambiar de un puesto a otro varía un poco pero no demasiado. Moreno habló conmigo y me preguntó si era muy traumático el cambio, pero yo le dije que no había ningún problema y lo que quería era ayudar al equipo. Si que es cierto que le comenté que necesitaba un tiempo para adaptarme porque hay un poco de diferencia a la hora de sacar el balón ya que los delanteros te presionan de una manera distinta. Ya estoy adaptado e incluso ya prefiero jugar de central izquierdo que en la derecha».