La crisis dispara un 12% la dispensación de medicamentos genéricos
La patronal pide al Gobierno más medidas para fomentar el consumo de estos fármacos sin patente
MADRID. Actualizado: GuardarLos fabricantes de medicamentos genéricos en España están contentos, aunque no tanto como quisieran. Durante los dos últimos años, cuando la crisis ha golpeado con más dureza, las ventas de estos fármacos que carecen de patentes pero que mantienen las mismas cualidades que sus homólogos de grandes empresas han aumentado. Por una parte, el despacho de estos productos subió del 8% al 13% del total de medicamentos dispensados, con una facturación estimada de unos mil millones.
También creció de forma considerable el consumo por unidades, que pasó del 13% al 25%, según la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (Aeseg), y este dato es el que hace realmente feliz a la patronal porque indica que uno de cada cuatro fármacos que se consume es genérico y que además, esta tendencia va en alza. «Un genérico tiene de precio medio 3,60 euros. Es asequible para gran parte de la población», explicó el director general de Aeseg, Ángel Luis Rodríguez, como una de las razones para explicar una mayor aceptación. La diferencia entre las subida de ventas y unidades radica en los ajustes de precio que hizo el Gobierno.
A pesar del incremento de las ventas en los últimos años, la venta de genéricos sigue siendo bastante inferior que otros países europeos. En Holanda, Reino Unido o los países nórdicos, la mitad de los medicamentos que compran sus ciudadanos son genéricos. Y en Estados Unidos se alcanzan cotas del 80%, «pese a que la industria farmacéutica y las patentes son muy potentes». España comparte la cola del pelotón con Grecia, Italia o Portugal. Para acabar con esta situación, la Aeseg pidió al Ejecutivo «medidas concretas» para fomentar este tipo de medicamentos, «más baratos para el consumidor y para las comunidades autónomas» que pagan una parte en las recetas extendidas por los médicos del Sistema Nacional de Salud (SNS). «Su fomento puede ser una medida de ahorro», apuntó Rodríguez.
Un impulso «de verdad» por parte de las administraciones para comprar estos productos y la realización de campañas de concienciación para su consumo son dos de las medidas que se piden desde esta patronal, que da trabajo a 30.000 personas (7.000 directos y 23.000 indirectos) y exportó en 2011 un 18% de su producción. Estas iniciativas se unirían a otras medidas que estableció el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, como la obligatoriedad de recetar genéricos en el SNS. «Además, siete de cada diez productos están hechos en España», recalcó el responsable de Aeseg.
Más acciones gubernamentales servirían para dar confianza a los usuarios. Según una encuesta elaborada por la propia patronal, el 80% de los españoles confía plenamente en los genéricos, lo que supone un aumento de 15 puntos con respecto a 2008 y de 35 puntos si se compara con el año 2000, cuando se hizo la primera evaluación. Además, algo más de la mitad de los españoles (53%) elegiría un genérico en caso de tener que pedir un medicamento recetado por principio activo en la farmacia. Por otra parte, más de un 70% de la población española cree que los medicamentos genéricos tienen la misma calidad, seguridad y eficacia que los medicamentos de marca y un 72% de los pacientes crónicos toma algún genérico de forma habitual.