El asesino de Don Benito es un vecino con antecedentes

Don Benito se despertó ayer con sabor amargo. La noticia de un tiroteo con tres víctimas mortales en un club de alterne de esta localidad pacense dejó impactada a la población. El suceso se produjo en un conocido local llamado Tabarín. El delegado del Gobierno en Extremadura, Alejandro Ramírez del Molino, indicó que el suceso se produjo entre las 22.00 y las 22.30 horas del sábado por motivos desconocidos. La investigación se encuentra bajo secreto de sumario.

Una de las víctimas mortales fue el camarero, que en el momento del tiroteo estaba al mando del club de alterne, puesto que el propietario del mismo se había marchado a su domicilio para cenar. Se llamaba Agustín Estirado, tenía poco más de 40 años, tres hijos y era natural de Usagre, adonde fue trasladado su cuerpo sin vida para darle sepultura. Llevaba trabajando cuatro años en el Tabarín. Los otros dos fallecidos, según aclaró Ramírez del Molino, fueron dos toxicómanos residentes en un centro de drogodependientes anexo al establecimiento en el que tuvo lugar el tiroteo.

El responsable del citado centro, José Antonio Ravelo, explicó que una de las víctimas era Santiago Sánchez Ruiz, de 41 años y natural de la localidad pacense. Tenía dos hermanos y su funeral será hoy a las 11.00 horas en el parroquia de Santa María de Don Benito. El otro fallecido se llamaba Fermín Corbacho, de 48 años, procedente de Guareña. Ambos salieron del centro al oír los disparos para ayudar y «al final se encontraron que los tiroteados fueron ellos, y los mataron», afirmó Ravelo, quien lamentó que dos personas que «estaban peleando por la vida», la hubieran perdido de esta manera. El presunto autor de los disparos, que se realizaron con una sola escopeta, se encuentra en busca y captura, «aunque está plenamente indentificado», aseguró el delegado del Gobierno.

Añadió que se trata de un vecino de la localidad con antecedentes por varios delitos. Del único detenido hasta al momento, que acompañaba al sospechoso del tiroteo, se sabe que es un delincuente habitual, natural de Cáceres pero residente en Don Benito, que ha estado varios años en la cárcel por cuestiones relacionadas con las drogas y prestará hoy declaración. Ramírez del Molino informó de que ninguno de los dos sospechosos fue identificado gracias a la existencia de varias cámaras de seguridad.

Desde el sábado por la noche, el propietario del local, Mariano, estuvo durante toda la noche del sábado al domingo, tras conocerse las muertes, colaborando con la Policía en la investigación, y Ramírez del Molino informó ayer que esta persona no estaba implicada en el incidente. Reconoció que «no es de buen gusto desayunar y leer que te han dado por muerto (se le dio por fallecido en un primer momento)». El cadáver del camarero fue encontrado en uno de los pasillos del club de alterne, mientras que los otros dos cuerpos fueron hallados fuera del local pero dentro del mismo recinto -cerrado con una malla metálica- donde se ubican tanto el Tabarín como el centro de drogodependientes.