La sequía y las heladas provocan daños de cien millones en el campo

Los agricultores y ganaderos de la provincia viven el peor año que puedan recordar. La sequía y las heladas han provocado cuantiosos daños en las explotaciones que el presidente de la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) de la provincia, Manuel Cádiz, cifró ayer en alrededor de cien millones de euros. «Los perjuicios en pastizales y dehesas son muy grandes, algunos no tendrían nada que hacer ya aunque mañana lloviera», recalcó el presidente de Asaja.

Frutales, cítricos, aguacates, hortícolas y cereales de invierno no se salvan de este ejercicio desastroso, que ha afectado también a la ganadería: «Todo está achicharrado», resumió Vázquez en la rueda de prensa que ofreció en el moderno edificio Citea que posee la organización en el Parque Tecnológico.

«Han sido daños de solemnidad, no conozco ninguno año que haya sido como éste», asegura el presidente de la organización agraria. De modo que han dirigido un un paquete de reivindicaciones a las administraciones públicas para que pongan en marcha medidas paliativas. Además de la declaración de zona catastrófica, está la petición de una línea especial de créditos para los agricultores y ganaderos «en condiciones preferenciales», en palabras de Vázquez.

También demandan que los cultivos sean objeto de indemnización y ayudas directas y exenciones en las cuotas del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) y otros gastos que soportan los agricultores, así como que se haga hincapié en las ayudas de la PAC, que «siempre se retrasan sine die», en palabras del presidente de Asaja Cádiz.

Otra medida tiene que ver con la puesta en marcha de redacciones reales de los costes de tarifas eléctricas, «que es un mal endémico».

Todo ello para amortiguar en la medida de lo posible «los daños importantes que hemos detectado en nuestra organización y nuestra provincia, especialmente damnificada». Habría que remontarse a 1905, «que está en la memoria de los agricultores», para recordar un ejercicio más desastroso, subrayó por su parte el secretario provincial de Asaja, Cristóbal Cantos.

«Podemos hablar claramente de sequía», incide en este sentido Manuel Vázquez, pues «en el tema de los pastos el campo gaditano está totalmente frito». De hecho, «hay zonas que están totalmente perdidas, como cereales, que no se arreglarían ya de ningún modo ni aunque lloviera mañana mismo».

Lo peor es que conforme los días van avanzando los daños son «más irreparables», según el presidente de Asaja Cádiz. De hecho, las perspectivas para este mes de marzo tampoco son «nada buenas».

Regadíos

Al menos hay una nota positiva. Según Cristóbal Cantos, «la pequeña diferencia con otras sequías anteriores es la situación de los regadíos, pues afortunadamente en la provincia tenemos otras infraestructuras de almacenamiento de agua que no había en anteriores sequías». Ello proporciona «garantías de suministro», algo importante porque «los fuegos no se apagan en invierno» según Cantos.

El secretario general de Asaja Cádiz hizo especial hincapié en la necesidad de una revisión en profundidad de los seguros agrarios: «No están adaptados a lo que necesita el campo ahora mismo. Se escucha demasiado la voz de las compañías y muy poco la de los agricultores», remachó Cantos.

La situación no es mucho mejor en el resto de Andalucía. El presidente de Asaja -A, Ricardo Serra, cifró ayer en 518,6 millones las pérdidas que el sector agrario ha sufrido durante este invierno por la falta de lluvias y las importante heladas. Serra precisa que las heladas han creado unas pérdidas que han ascendido a 167,9 millones, junto a los daños por sequía que han alcanzado los 350,7 millones de euros. A estas pérdidas, de seguir así habrá que sumarle los daños que se producirán en el olivar, que dará la cara en la próxima campaña, y que podrían llegar a los 360 millones aproximadamente.

Serra destaca que la situación del campo es «dramática», ya que a la situación «difícil» de precios bajos se ha unido una pluviometría que en lo que va de campaña agrícola se sitúa por debajo del 60 por ciento de la acumulación normal, incluso hay zonas como Sevilla, Córdoba, Cádiz o Huelva donde el déficit hídrico supera el 70 por ciento. Los daños por heladas han afectado a cítricos, patatas, frutas de hueso, frutos secos, ajos, cebollas, leguminosas, flor cortada, cultivos subtropicales, hortícolas en general y daños en plantaciones. Ante esta situación, va a continuar evaluando los daños a lo largo del tiempo y trasladará sus informes.