Margallo dice que el Rey «saca las castañas del fuego» en el exterior
El ministro descarta que un territorio segregado de un país de la UE sea reconocido por los 27
MADRID. Actualizado: GuardarEl ministro de Asuntos Exteriores defendió ayer el peso específico de don Juan Carlos en la diplomacia española. «El Rey nos está sacando las castañas del fuego» en algunos países, afirmó José Manuel García-Margallo, y puso el ejemplo de Arabia Saudí, donde los buenos oficios del monarca permitieron suscribir un contrato de 6.000 millones de euros para varias empresas españolas en la construcción del tren de alta velocidad entre Medina y La Meca.
El jefe de la diplomacia señaló que «si no fuese» por el Rey, España estaría «en dificultades en determinados países», pero gracias a su papel la situación es otra. Margallo, por «discreción», no quiso precisar a qué estados se refería.
El ministro también defendió el papel que juega el expresidente del Gobierno Felipe González, «un patriota» con «sentido de Estado», dijo. Margallo señaló que el Gobierno de Mariano Rajoy, y más en concreto su departamento, «contará mucho» con el exgobernante socialista para diferentes misiones. González disfruta, sobre todo, de una notable influencia entre los gobernantes latinoamericanos, pero también tiene un buen cartel en la Unión Europea.
Independencia
El responsable de la política exterior también explicó en un desayuno informativo que la UE no contempla la admisión en su seno de territorios independizados de uno de sus estados miembro siempre que la segregación no esté contemplada en el marco legal de ese país. Margallo hizo este comentario a propósito de Escocia, que negocia con el Gobierno británico la celebración de un referéndum independentista. Si los escoceses votan a favor de la separación del Reino Unido y la decisión se enmarca en las disposiciones constitucionales de ese país, precisó el ministro, la UE se remitiría a los requisitos de adhesión fijados en los tratados de Maastrich y Copenhague.
Una hipótesis, añadió, que no es factible en España. Margallo indicó que en la Constitución española «la secesión no es posible» porque el artículo dos establece «la indisoluble unidad de la nación española, patria común e indivisible de todos los españoles». La independencia de una parte de España, insistió, «no es posible» dentro del marco constitucional. Para que ese supuesto se produjera, afirmó, habría que «volar la Constitución y empezaríamos una cosa distinta».