El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta. / Archivo
el déficit de 2012

Hacienda, a las comunidades: «No habrá ninguna flexibilidad»

El secretario de Estado, Antonio Betetea, recuerda que ya se comprometieron a un 1,3% en 2011

MADRID Actualizado: Guardar
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El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, ha advertido a las comunidades autónomas de que "no hay ninguna flexibilidad" en los objetivos de déficit público de este año, y ha recordado que ya se comprometieron a un 1,3% en 2011. "Ya aprobaron un déficit del 1,3% (para 2011), ahora sólo hay que avanzar habida cuenta de la situación", ha afirmado Beteta en declaraciones a los periodistas en el marco de un encuentro financiero organizado por Bankia y El País. Para 2012, las comunidades deben tener un déficit del 1,5%.

El secretario de Estado ha subrayado que además el Gobierno aprobará un préstamo sindicado de 35.000 millones de euros, para comunidades y ayuntamientos, con el fin de que puedan pagar a proveedores, y ha indicado también que el Gobierno ha ampliado a diez años el plazo de devolución de los ingresos de más que recibieron las comunidades. Igualmente, ha recordado que las comunidades se beneficiarán de la subida del IRPF.

"El Estado ha dado muchos pasos, ahora les toca a las comunidades dar los siguientes", ha sentenciado el secretario de Estado, para después indicar que las administraciones territoriales dispondrán de una financiación "muy semejante" a 2011.

Durante su intervención en las jornadas, Beteta ha valorado la ley de estabilidad presupuestaria como "mecanismo riguroso" para evitar desviaciones y que se pueda sancionar en caso de incumplimientos de déficit público y deuda. "Es obligatorio seguir la senda de la consolidación", ha enfatizado. Por ello, Beteta ha defendido que las administraciones son el "epicentro del cambio" para asumir "errores propios" y ser capaces de corregirlos. En este sentido, ha admitido que algunas administraciones han recurrido al "clientelismo", al asegurar que ofrecían empleos que no se justificaban con los servicios prestados.