Las nuevas caras de la disidencia
MOSCÚ.Actualizado:Multitud de nuevas caras y movimientos de oposición han surgido en los últimos meses en Rusia. Constituyen la disidencia moderna, la vanguardia de la oposición a Vladímir Putin. En los 12 años que lleva en el poder no se había visto nada parecido, pero esta nueva savia ha venido a reforzar a los veteranos opositores.
Hasta hace apenas seis meses, los líderes de la oposición a Putin eran los mismos que se levantaron contra él una década atrás. Pero ahora han aparecido nuevos disidentes, como Iliá Yashin, de Solidarnost (Solidaridad), o Serguéi Udaltsov, coordinador del llamado Frente de Izquierdas y principal dirigente del movimiento Vanguardia de la Juventud Roja. Otra figura que ha emergido con fuerza es el bloguero anticorrupción, Alexéi Navalni, al que muchos vaticinan el liderazgo de un gran partido de oposición aún por crear.
Ninguno de los citados hasta el momento creyó jamás que el todavía presidente, Dmitri Medvédev, continuaría un mandato más e incluso, aunque lo hubiera hecho, no confiaban en que modernizaría el país, diversificaría la economía y democratizaría la vida política. Pero un gran sector de la elite rusa y de la clase media urbana sí lo creían. Sin embargo, todas las esperanzas se vinieron abajo cuando, el pasado 24 de septiembre, Medvédev renunció a ser candidato a presidente y dejó vía libre a Putin.
A partir de aquel momento, se articuló una verdadera plataforma de oposición al sistema y la indignación aumentó aún más después de que los resultados de los comicios legislativos del pasado 4 de diciembre fueran falsificados.
En las grandes manifestaciones convocadas para denunciar el fraude electoral aparecieron, además de los opositores de siempre, personajes nuevos. Muchos de ellos habían estado vinculados o identificados con el régimen de Putin, como la hija de su mentor político. Al firmamento opositor también se incorporaron famosos escritores, influyentes periodistas y populares personajes de la televisión.
Casi todos ellos integran la ejecutiva de la Liga de los Votantes, una estructura que ayer supervisó la marcha de las votaciones y el escrutinio.