Putin regresa al Kremlin de forma aplastante
El líder del Partido Comunista de Rusia, Guennadi Ziugánov, ha sido el segundo candidato más votado con el 17,68%, aunque ha tachado los comicios de "robo"
CORRESPONSAL EN MOSCÚ Actualizado: GuardarLa aplastante victoria en primera vuelta de Vladímir Putin en los comicios presidenciales que tuvieron lugar este domingo en Rusia parece corroborada por los sondeos a pie de urna y por los resultados oficiales facilitados por la Comisión Electoral Central (TsIK). Putin ha ganado con el 63,75% de los votos la primera vuelta de las elecciones presidenciales celebradas el domingo, según los resultados divulgados con el 99,3% del escrutinio completado. «Hemos vencido. Hemos ganado en una lucha abierta y limpia», exclamó Putin, eufórico y con lágrimas en los ojos, a sus seguidores concentrados en la plaza del Manezh, junto al Kremlin.
Para ser elegido sin necesidad de una segunda ronda electoral hace falta obtener el 50% de los votos más uno. Así que, por mal que se le dé al mandatario ruso el recuento de votos en adelante, parece tener garantizado el sillón presidencial para los próximos seis años. Y eso que cuando el escrutinio finalice en ciudades como Moscú o San Petersburgo su porcentaje caerá.
La oposición y ha denunciado los resultados y saldrá a la calle para mostrar su rechazo. El que no está en absoluto de acuerdo con los datos preliminares es el comunista Guennadi Ziugánov, que ha declarado que los comicios «no han sido limpios, justos ni tampoco dignos». Ziugánov ha anunciado que impugnará los resultados de la votación, si cuando termine el recuento se mantiene la actual tendencia. Prójorov, por su parte, dijo que no aceptará ningún cargo en el Gobierno que se forme tras la toma de posesión de Putin. Su intención ahora es crear un nuevo partido de corte liberal para «continuar luchando por el poder».
Del mismo modo, el exdiputado Vladímir Rizhkov, uno de los organizadores de las pasadas manifestaciones y de la convocada para mañana en el centro de Moscú, afirmó ante las cámaras de televisión que las elecciones «no han sido legítimas». Según sus palabras, en unas horas «habremos contabilizado entre 20.000 y 30.000 casos de fraude». Los datos parciales asignan a Ziugánov el 17,8% de los votos, al ultranacionalista Vladímir Yirinovski el 8%, al multimillonario Mijaíl Prójorov el 7,5% y al centrista Serguéi Mirónov el 3,6%.
En declaraciones a la agencia Interfax, el expresidente soviético, Mijaíl Gorbachov, puso ayer en duda que «el resultado de estas elecciones reflejen la situación real de la sociedad rusa». A su juicio, «Putin ya había sido elegido antes de que se celebrasen las elecciones, por lo que ahora tendremos que concentrarnos en lograr un cambio en profundidad de nuestro sistema electoral como única forma de conseguir que en adelante los comicios sean limpios». Gorbachov pidió también convocar antes de final de año unas nuevas elecciones legislativas.
Ya mucho antes de que cerraran los colegios, la ONG Golos (voto) denunció más de 3.000 irregularidades. Hubo personas que votaron más de una vez en distintos colegios, algo posible en Rusia si se obtiene el correspondiente permiso. Se dieron también casos de intimidación a votantes, se impidió el acceso a los colegios a interventores y algunos fueron incluso agredidos.
Tiroteo en un colegio
La jornada electoral, sin embargo, transcurrió sin grandes incidentes, salvo un tiroteo contra un colegio electoral en la república norcaucásica de Daguestán. Murieron tres policías. En Moscú, al colegio en donde voto Putin -que apareció después de mucho tiempo acompañado por su esposa Liudmila- llegaron 15 minutos después tres activistas de la organización feminista ucraniana Femen y se desnudaron mientras gritaban «`Putin fuera, Putin ladrón!». Arrojaron al suelo la urna, antes de ser reducidas por varios agentes.
Este domingo fueron convocados a las urnas 110 millones de ciudadanos. En total, 21 horas seguidas de votación debido a la magnitud de Rusia y a sus nueve husos. Nada más finalizar las votaciones, los partidarios del reelegido presidente ruso se concentraron en la Plaza del Manezh. Fue organizado un concierto, tras el que acudió al acto el «candidato vencedor» exultante. Según la Policía, se reunieron unas 70.000 personas.
En previsión de posibles desórdenes, fuerzas antidisturbios y tropas del Ministerio del Interior acordonaron la Plaza Roja y los aledaños. Los locutores de la emisora Eco de Moscú se preguntaron si lo que hubo ayer fueron unas elecciones o un «golpe de Estado».
Para hoy hay convocada para las seis de la tarde una gran concentración opositora en la Plaza Pushkin de la capital rusa. Protestarán por las falsificaciones habidas en la jornada electoral de este domingo. Cerca, en la Plaza del Manezh, volverán a salir los simpatizantes de Putin.