Cristiano fulmina al Rayo
Una genialidad del portugués, que marcó de tacón, sirvió a los blancos para firmar una afortunada y polémica victoria que huele a Liga El Madrid se vio superado y sufrió hasta el final en Vallecas para ganar
MADRID. Actualizado: GuardarUna genialidad de Cristiano Ronaldo, un taconazo que salvó todas las piernas en el área local, fulminó al valiente Rayo en Vallecas, donde el Real Madrid se vio superado, salió vivo de milagro y triunfó en terreno tan incómodo gracias, una vez más, al crack portugués, y también a Casillas. El espectacular gol de Cristiano, similar al que marcó Toquero el pasado mes al Albacete en la Copa, permitió respirar al Madrid, aunque no puso fin a las dudas, porque el digno Rayo se rehizo y acarició hasta el último momento un empate que mereció. Su falta de puntería y una impresionante mano de Casillas evitaron la igualada en un partido muy sufrido y afortunado para el líder, que acabó pidiendo la hora en Vallecas y sufrió una agonía hasta el pitido final.
El Madrid, a merced del Rayo en muchas fases del partido y durante todo el primer tiempo, en el que el Rayo también tuvo un remate al poste, pudo firmar, sin fútbol y sin apenas ocasiones, su novena victoria liguera consecutiva a domicilio, para igualar su récord y dar otro paso importantísimo hacia el título. El triunfo no estuvo exento de polémica, ya que el árbitro perdonó la expulsión a Sergio Ramos y un penalti a los blancos en el minuto 19, por un codazo a Diego Costa cuando el sevillano ya tenía amarilla. Sin embargo, Fernández Borbalán expulsó a Michu en el 89' por ni siquiera hacer falta a Khedira, ya que el rayista tocó balón. No le sentó nada bien al Madrid el inusual horario, un césped tan irregular y un campo tan pequeño, aunque ante lo que realmente padeció, más que nunca fuera desde que fracasara contra el Levante y el Racing, fue frente al atrevimiento, presión, y actitud ofensiva y apuesta del fútbol del Rayo.
Se dejó dominar el Madrid por el Rayo durante los primeros 45 minutos, en los que prefirió esperar al contraataque. El pequeño fue grande en el primer tiempo y el poderoso decepcionó, cortó el juego con continuas faltas, y fue favorecido por el arbitraje. Pudo ser clave el penalti y la expulsión de Ramos, pero lo que mató al Rayo, además de Cristiano, fue su ausencia de remate, porque en el último minuto, Armenteros falló solo a portería vacía.
Beneficiado por los errores arbitrales y por el ataque del Rayo, y bendecido en esta ocasión por un tacón de 'CR7' y por la mano de Iker. Cuando no funciona, al Madrid siempre le quedan la magia y los goles de Cristiano (ya suma 29 camino de otra plusmarca) y las intervenciones de su portero. El Rayo maldecirá su falta de puntería, la aparición de una estrella que marcó de espaldas en su primer disparo a puerta, y las ayudas del colegiado a un líder que no se comportó como un grande en Vallecas pero le valió para ganar.