Tarragona marca el camino

«Es el partido más difícil de la temporada». El mensaje lanzado a los medios desde el seno del vestuario del Xerez tiene su aquel, pero no está falto de realismo, a pesar de que se pueda pecar de falsa modestia. El conjunto azulino ha hecho los deberes en las últimas semanas, pero está claro que el curso no ha acabado y que el riesgo de suspender existe, a pesar de las victorias ante Guadalajara y Alcoyano, dos rivales de la Liga particular que el equipo xerecista está batiendo desde hace ya meses. Tras alcarreños y alicantinos ahora toca pensar en el Nàstic (Nou Estadi, 18.00 horas), un equipo de capa caída, con etiqueta de colista y el ego tocado, a pesar del carácter de su técnico, Jorge D'Alessandro. A priori, el rival es el idóneo para lograr la tercera victoria consecutiva de la temporada, la segunda a domicilio de la era Moreno, pero eso es a priori, ya que las adversidades que se pueden encontrar los xerecistas son varias.

Para empezar, el técnico valenciano ha decidido que sus pupilos no se relajen, pero lo ha hecho de puertas hacia dentro. Mientras los entrenamientos mostraban cordialidad, el vestuario se ha blindado para poner tierra de por medio en una clasificación que semanas atrás no deparaba un buen augurio. Los complejos y traumas parecen que han desaparecido, pero Moreno, que fue cocinero antes de fraile, ha optado por hacer la de Guardiola, es decir, que no hay rival débil ni campo apacible en esta jungla llamada Liga. Además, el trabajo se le ha doblado a un Moreno que tiene sensibles bajas para el encuentro de esta tarde. Rueda y Maldonado por lesión, y Cordero y Bruno por sanción, han obligado al preparador del Deportivo ha modificar el once que ha sacado seis de seis en los últimos 15 días. Aún así, el valenciano no quiere trastocar en demasía el equipo y opta por colocar a Rafa Barber como acompañante de un Rafa García que en poco tiempo se ha ganado el sitio. La otra duda la tiene el técnico del Xerez en la banda izquierda. La entrada de Capi la semana pasada cambió el rumbo del partido, por lo que el de Camas se postula como titular por banda izquierda, dejando a Capdevila en el banquillo. Es una posibilidad, ya que podría ser José Mari el que actúe por banda ante su exequipo, siendo Capi el enlace con la delantera. Un Capi que esta tarde podría certificar su renovación por una temporada más en el Xerez, ya que, teniendo en cuenta su contrato, por participación en partidos el sevillano ampliaría una campaña más su vinculación con el Xerez. De enhorabuena también estará Mendoza. El jerezano puede igualar hoy en el Nou Estadi el número de partidos disputados por Vicente Moreno y pasar a ser dentro de poco el jugador con más encuentros disputados del Deportivo en toda su historia. Tanto el jerezano como el sevillano pueden terminar el duelo de esta tarde con una sonrisa, aunque ambos han asegurado que lo importante es vencer al Nàstic.

Un Nàstic cuyo futuro pasa inevitablemente por ganar al Xerez , pues todo aquello que no sea sumar los tres puntos no sirve de nada al equipo entrenado por Jorge D'Alessandro. «Estamos delante de un partido total. Debemos conseguir la victoria», sentenció el entrenador bonaerense. El equipo, hundido en la última posición de la clasificación, ha vivido una semana atípica con la rocambolesca historia de Berry Powel. El holandés, que ya no figura en la plantilla por su falta de compromiso con el club, ha acaparado toda la atención mediática de un equipo que necesitaba un poco de tranquilidad para asumir sin ansiedad sus particulares finales. La victoria entre semana en cuartos de final de la Copa Catalunya ante el Torreforta (1-4) también ha servido de motivación extra para una plantilla que sólo piensa en subirse al carro de los equipos que lucharán a final de la temporada por mantener la categoría. Ahora mismo, la salvación se encuentra a seis puntos y el equipo de D'Alessandro mantiene, con prudencia, la idea de que todo es posible.

Morán y Peragón serán los hombres más adelantados del equipo que planteará el «poeta de la plata», Jorge D'Alessandro, en su vuelta al 4-4-2 tras la derrota ante Las Palmas, donde propuso un 4-2-3-1. Álvaro Rey y Dani Abalo abrirán el campo en los extremos y la novedad será ver la participación de Arzu acompañando a Longás en el centro del campo.