La plantilla de los autobuses corta el tráfico en Cristina

Los trabajadores de la concesionaria del transporte urbano en la ciudad, Urbanos Amarillos, se sumaron ayer a las múltiples protestas que tuvieron lugar en la ciudad para reclamar el pago de los salarios pendientes. Los trabajadores, que llevan ya más de cuatro semanas de huelga, se concentraron en las puertas del Ayuntamiento, además de manifestarse por el centro de Jerez y cortar el tráfico a las diez de la mañana.

Los trabajadores han agotado ya su paciencia e incluso han confesado a este medio sentirse «utilizados» por la empresa «para hacer presión al Ayuntamiento y que afloje dinero». Asimismo, se quejan de que la compañía haya incumplido su promesa de pagar la mitad de diciembre entre los días 15 y 17 de febrero, por lo que la huelga sigue adelante de forma indefinida de lunes a viernes. «El Ayuntamiento no paga pero también es cierto que la empresa tiene una responsabilidad y debe pagar a sus trabajadores», insisten desde el comité.

Mientras tanto, el Ayuntamiento destaca que la municipalización del servicio «por el momento es inviable dadas las actuales circunstancias económicas del Ayuntamiento», en palabras del delegado de Movilidad y Personal, Javier Durá. No obstante, los trabajadores de la empresa insisten en esta medida apelando, entre otros factores, a una mayor implicación social de la plantilla dado que los beneficios del mismo recaerían sobre el propio Ayuntamiento de Jerez y no en una empresa externa.

Y en medio de todo este conflicto laboral, los ciudadanos y los comerciantes son los principales perjudicados por una huelga que está causando estragos, una vez más, en la ciudad.