«Si un hijo mío pone un pie en la cárcel, hablaré y habrá un gran escándalo mundial»

Después de que José María Ruiz-Mateos no compareciera ayer en un juzgado de Palma para declarar por un presunto delito de estafa y la jueza le advirtiera de su posible detención, había mucha expectación por saber qué es lo que diría el empresario jerezano en la entrevista que le iba a realizar el programa Espejo Público de Antena 3. Y lo cierto es que su intervención no ha dejado a nadie indiferente. Después de una tensa discusión con la presentadora Susana Griso, Ruiz-Mateos comenzó un monólogo en el que volvió a arremeter contra la justicia, pidió 'ayuda' a Botín con un crédito para pagar a los inversores y lanzó un serio aviso: «Si un hijo mío pone un pie en la cárcel, habrá un gran escándalo de una envergadura mundial».

Ruiz-Mateos, visiblemente cansado, comenzó su intervención apuntando a aquellos que realizaron «la verdadera estafa, la de Nueva Rumasa. Es grave lo que han hecho los autores. ¿Sabía usted que Nueva Rumasa empezó de la nada? Incluso el señor Gordillo ya me dijo que no había sido juzgado como debía», apunto en referencia al ex fiscal. José María Ruiz-Mateos aprevechó la intervención televisiva para «pedir una tregua a los responsables para que se comparten como Dios manda. Cuando la gente no olvida tras 22 años, malo. He estado callado, aguantando 29 años oyendo tonterías de unos y otros. La Justicia no existe. No me arrepiento de nada porque lo he hecho pensando en la empresa y los españoles. Si yo hablara, sería un escándalo enorme. Que los autores del primer crimen de Nueva Rumasa se manifiesten y digan la verdad», ha clamado con vehemencia. Tal vehemencia que cada vez que alguien desde el plató de Antena 3 quería intervenir para hacerle alguna pregunta le cortaba tajantemente o restando importancia a sus cuestiones formuladas.

«Llevo 29 años sin justicia con una paciencia inmensa. Ahora la han tomado con mis hijos. Lo de las hipotecas es una chorrada (en relación a si pagaba las hipotecas de sus hijos con dinero de los inversores). Si un hijo mío pisa un pie en la casa, hablaré todo lo que tengo que hablar y habrá un gran escándalo de una envergadura mundial. No pierdo mi tiempo en esas chorradas», amenazó reiteradamente.

Cuando consiguieron preguntarle sobre los inversores a los que les debe dinero, volvió a insistir en su mensaje de tranquilidad. «A los inversores les digo que cobrarán. Expreso mi admiración por el señor Botín, que de la nada ha sacado el tercer bando del mundo, pero no entiendo que no hable ahora con el tema de Nueva Rumasa. Para mí sería facilísimo aprovechando el 23F que apruebe un crédito para recuperar las deudas y pienso pagar a todo el mundo. Los empleados son los mejores. Van a cobrar todos. A los que me acusan de estafador les perdono porque no saben que es lo que dicen. Los estafadores son los que nos estafaron a nosotros en la primera Rumasa», culminó ante de finalizar con unos reveladores «¡Ojo avizor! ¡Vaya con Dios!» cuando se quitaba los auriculares y hablaba ya internamente con su hijo José María, que le acompañó durante la entrevista ante las dudas que había surgido en los últimos día sobre si se hablaba con sus hijos.

José María Ruiz-Mateos hijo también ha intervenido, aunque ha sido el cabeza de familia el que le ha marcado la pauta a la hora de hablar: «Respecto al auto del juez Ruz ruego que lo lean con detenimiento porque solo es el informe previo que habla de suposiciones. Lo que queremos pedir es que no se haga un juicio paralelo y mediático de todo lo que está sucediendo. No podemos estar permanentemente defendiéndonos. Queremos cumplir con todo el mundo. Lo que no puede ser es que señores que no han creado un puesto de trabajo en su vida nos juzguen desde un plató de televisión. No tenemos yates ni fincas ni lujos»

Susana Griso ha terminado exponiendo que ha sido «la entrevista más frustrada de toda mi vida», después de que ambos se descolgaran los auriculares y se levantaran desde el lugar donde estaban siendo entrevistados.