Rajoy: «No habrá cambios sustanciales en la reforma laboral»
"Sé cuáles son las posiciones de los sindicatos pero el Gobierno tiene la obligación de gobernar", asegura el presidente
ENVIADO ESPECIAL A LONDRESActualizado:Mariano Rajoy ha enviado desde Londres un claro mensaje a los sindicatos: "No quiero engañar a nadie, modificar la reforma laboral no sería bueno para España". El presidente del Gobierno, durante una comparecencia conjunta con el primer ministro del Reino Unido, David Cameron, responde de esta manera a la misiva que le han hecho llegar las centrales obreras. En esta carta que, según ha apostillado Rajoy, no le ha llegado físicamente pero que la ha conocido a través de los medios de comunicación, UGT y CC OO le piden que atienda a las manifestaciones que se produjeron el pasado domingo en 54 ciudades españolas y que modifique algunos de los aspectos clave, como el abaratamiento del despido o la práctica desaparición de la negociación colectiva.
Durante la rueda de prensa conjunta con el primer ministro británico, David Cameron, tras la reunión que han mantenido ambos mandatarios en la capital británica, Rajoy ha recordado que ha hablado con las organizaciones sindicales antes de ser presidente y que los sindicatos han mantenido numerosos contactos tanto con el anterior Ejecutivo como con el actual. "Pero el Gobierno tiene la obligación de gobernar, sé cuáles son sus posiciones y también las de la CEOE, pero en un país donde más de 5 millones de trabajadores quieren trabajar y no pueden y donde más del 40% de los jóvenes quieren trabajar y no pueden, había que tomar decisiones", ha subrayado Rajoy, tras añadir que la reforma laboral es "justa y equilibrada".
Según el presidente del Gobierno, la reforma servirá para crear empleo cuando la economía española empiece a crecer y favorecerá la contratación por parte de pymes y autónomos. "Es verdad que puede no gustarle ni a los sindicatos ni a la CEOE, pero el Gobierno debe defender el interés general y trabajar para el crecimiento y el empleo", añadió Rajoy, quien indicó que la legislación laboral "no podía esperar más tiempo" para ser modificada y que el Gobierno no podía estar "anquilosado" en el pasado.