La dirección popular es cosa de hombres

Dolores de Cospedal es la única mujer en la dirección del PP. No hay ninguna más entre los vicesecretarios generales ni entre los coordinadores ni entre los secretarios ejecutivos. Hay que 'bucear' hasta los secretarios sectoriales para encontrar a Sandra Moneo como responsable de Educación e Igualdad y a Marisa Soriano, encargada de Agricultura y Medio Ambiente.

La única mujer, además de Cospedal, que ha sido promocionada en el XVII Congreso del PP ha sido la presidenta de los populares de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, que presidirá el Comité electoral Nacional, pero es un cargo más simbólico que otra cosa porque ese organismo, encargado de aprobar las candidaturas, actúa al dictado del comité de dirección del partido, el núcleo duro del PP.

La paridad nunca ha estado entre los principios rectores del partido que lidera Mariano Rajoy, donde se prima el mérito y la preparación sin distinción de sexo, pero nunca habían tenido los populares tan escasa presencia femenina en sus principales órganos de dirección. En el anterior comité de dirección Cospedal estaba acompañada de Ana Mato.

Se da la circunstancia de que la principal responsable de esta situación es la propia secretaria general, que llevó en persona las negociaciones para formar el equipo directivo y acordó con Rajoy los nombres de los coordinadores y secretarios ejecutivos.

La paridad, sin embargo, reaparece en la lista de los vocales del Comité Ejecutivo Nacional. De los 35 elegidos por Rajoy, 18 son mujeres y 17 hombres. Algunas con tanto peso como la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, y las ministras Fátima Báñez, Ana Mato y Ana Pastor. En la lista de vocales también están Rita Barberá, Ana Botella, Celia Villalobos y Lucía Figar.

Esta situación, de todas maneras, puede ser un espejismo si Rajoy decide que las reuniones de 'maitines', en las que se fija la estrategia gubernamental y del partido, no se limiten al comité de dirección como ocurría en la anterior legislatura. Si el presidente del Gobierno traslada, como todo apunta, el centro de decisiones al palacio de la Moncloa es indudable que en esas reuniones participará Sáenz de Santamaría, la mujer en que más confía, según sus propias palabras. De esa forma Cospedal no sería la única mujer en el núcleo duro del PP pese a no tener un cargo de peso en el organigrama del partido.