La plantilla de Navantia duerme en sus factorías para soñar con el encargo de los BAM
Los comités de empresas de Cádiz y San Fernando se encierran en los astilleros para llamar la atención del ministro de Defensa que mañana viene a la provincia
Actualizado: GuardarHacía frío, pero menos que en días anteriores. Un centenar de personas hablaban de sus cosas aunque el tema estrella era lo que se iba a hacer durante el encierro, cómo se iba a dormir, en qué se iban a distraer. Algunas voces recordaban lo que ocurrió hace años, malos presagios. Esperan no volver a llegar a ese extremo aunque estarían dispuestos. Entonces se vieron con el agua al cuello ante la amenaza de cierre lanzada por el Gobierno.
Ahora la situación es distinta pero comienza a parecerse. La situación comienza a ser delicada ya que el próximo martes los astilleros de Puerto Real se quedarán ya sin ningún tipo de labor. En el caso de San Fernando en junio dará salida al último Buque de Acción Marítima. Después de esto, tan sólo le quedará en cartera el programa de doce pequeñas lanchas de desembarco para la Armada australiana, lo cual no supone una carga de trabajo suficiente para este centro. Y finalmente, el centro de Reparaciones de Cádiz-San Fernando, tan sólo tendrá trabajo en febrero y, luego en mayo, cuando venga el crucero Royal Caribean.
Por ello buscan una respuesta en firme del nuevo Gobierno, para que los viejos fantasmas no se conviertan en una pesadilla. Razón por la que los comités de empresas de Navantia de Cádiz y San Fernando (más de 30 personas) decidieron dormir en sus factorías para espantar los malos sueños y que al despertar se convierta en realidad el segundo pedido de los Buques de Acción Marítima (BAM) a la espera de que se lleve a cabo la orden de ejecución, último trámite burocrático una vez que Defensa y la empresa naval han cerrado los detalles técnicos y también los económicos.
Un encierro que realizan para llamar la atención del ministro de Defensa, Pedro Morenés, que hoy visita la provincia, precisamente al acto de entrega de un nuevo BAM. "No queremos manejarnos en la duda porque hay cierta incertidumbre. Sobre todo porque si hay alguien a quien se le fíe es a Defensa, con ellos no hay ningún tipo de problemas y queremos que se dé una fecha de la orden de ejecución, al menos un compromiso en firme", resaltó, José Antonio Oliva, presidente del comité de La Isla.
En la puerta del centro han estado acompañados por un centenar de compañeros que se marcharon cuando el frío apretó.
Mañana a partir de las doce de la mañana realizarán una nueva concentración, aunque en esta ocasión contarán con el apoyo de toda la plantilla, en este caso de unas mil personas. A esa hora, el ministro ya habrá realizado su primera comparecencia ante los medios, pues antes de acudir a la base naval de Rota (en la que se realizará la entrega del buque) visitará las instalaciones del Tercio de Armada de San Fernando, a escasos metros de la factoría de Navantia.
De forma que será una concentración importante ya que en ese momento sabrán si han conseguido o no lo que se proponían, si pueden dormir tranquilos o esperan tener pesadillas.