Twitter pone coto a los 140 caracteres pero huye de la palabra censura
La compañía anuncia que podrá restringir contenidos de manera local para adaptarse a las leyes de cada país
MADRID.Actualizado:Twitter podría perder la característica que hizo de esta red social un catalizador para la primavera árabe y para todas las revueltas que han venido después. La compañía anunció ayer una suerte de censura local que tendrá como objetivo restringir los contenidos que infrinjan las leyes de cada país. De esta forma, la empresa se asegura la adaptación de su herramienta de 'microblogging' a la legislación vigente en los distintos países en los que la red social está presente. «Antes, cada vez que eliminábamos un contenido, teníamos que hacerlo globalmente. A partir de hoy, tendremos la capacidad de no publicar los comentarios de los usuarios en algunos países, aunque sí los publicaremos en el resto», anunció la firma estadounidense a través de su blog.
Según señala en el comunicado, que no aclara cómo se llevará a cabo este control, cada país cuenta con «un concepto e ideas diferentes» de lo que es la libertad de expresión. Y pone un ejemplo: «Hay países que, por razones históricas o culturales, restringen cierto tipo de contenidos, como Francia y Alemania, donde la apología nazi está prohibida». En otros, sin embargo, puntualizan «las ideas son tan diferentes a las nuestras que no podremos existir».
Pero las críticas no han tardado en llegar. Miles de personas se quejaban ayer en Internet y en la propia red social de la decisión de la compañía. Reporteros sin Fronteras, incluso, solicitaron una rectificación por considerar que este cambio de política limita a una herramienta «crucial» para la ciberdisidencia. La respuesta de Twitter no se hizo esperar. «Nuestro anuncio no tiene nada que ver con la censura», argumentaba un portavoz de la compañía, que apuntaba a que el anuncio «no implica ningún tipo de cambio» en la política o filosofía que desde Twitter se da a la libertad de expresión.
Sus palabras no hacían más que apuntalar el comunicado lanzado por la compañía en el que se aseguraba que aún no ha tenido que hacer uso de esta nueva función pero avisaba de que cuando lo hagan se lo notificarán al usuario. «Uno de nuestros principales compromisos como empresa es el de defender y respetar la voz de cada usuario. Seremos transparentes con los usuarios cuando no podamos. Los tweets deben seguir su curso», concluía el mensaje de la compañía erradicada en San Francisco.
Pese a que la empresa de los 140 caracteres lo niega, el asunto recuerda a la censura que practicó durante años Google para poder operar en China. El agua colmó el vaso cuando se descubrió que las cuentas de Gmail de decenas de activistas chinos se estaban vigilando sistemáticamente. Eso, unido a los intentos de China por bloquear sitios como Facebook, Twitter, YouTube o Blogger llevaron al gigante de la red a tomar la decisión de retirarse de este mercado asiático.