Torres-Dulce apuesta por hacer «aún más visible» la independencia de la Fiscalía
El fiscal general cree que debe ser el Ministerio Público quien solicite el presupuesto que necesita y prepare a los futuros acusadores
MADRID.Actualizado:Eduardo Torres-Dulce, que el lunes tomará posesión de su cargo de fiscal general del Estado, se comprometió ayer en el Congreso a «hacer aún más visible» la autonomía funcional y orgánica del Ministerio Público «frente a los poderes públicos y muy singularmente respecto del Gobierno». «Pienso que es posible y necesario seguir avanzando en el diseño constitucional de un ministerio fiscal que ejercite sus funciones en un ámbito de autonomía real frente a los poderes públicos y muy singularmente respecto del Gobierno», dijo Torres-Dulce en su comparecencia ante la Comisión de Justicia, que valoró y aprobó su idoneidad para el puesto.
Entre las medidas que contribuirían a profundizar esa autonomía, el futuro fiscal general citó la «singularidad presupuestaria», de modo que sea la Fiscalía la que cada año proponga el dinero que necesita para asegurar su funcionamiento y, de acuerdo con ello, el Gobierno fije una partida en los Presupuestos Generales para su aprobación en las Cortes. También reclamó que se atribuyan a la Fiscalía las competencias en materia de formación de los fiscales para lo que propuso que el Consejo Fiscal, cuyos miembros son elegidos por los miembros de la carrera, tenga «un mayor papel» en materia de nombramientos e informes de leyes, puesto que en la actualidad su función se limita a asesorar al fiscal general y su opinión no es vinculante.
Torres-Dulce consideró asimismo «urgente e imprescindible» la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal y sostuvo que si se atribuyen al fiscal la función de investigar los delitos también debe dotársele de otras competencias. «La posible atribución de funciones investigadoras al Ministerio Fiscal debería implicar un reforzamiento de su autonomía estatutaria y la adscripción de unidades policiales y periciales con dependencia exclusiva para hacerlo creíble y eficiente», señaló.
El Gobierno, sin embargo, no es partidario, según explicó horas antes en ese mismo marco parlamentario el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, de dejar la instrucción de las causas en manos del Ministerio Público y prefiere que la investigación siga, como hasta ahora, en manos de los jueces.
Idóneo
Tras su intervención, todos los grupos coincidieron en que Torres-Dulce reúne los méritos y requisitos legales para ocupar el cargo de fiscal general. «Usted cumple, sin ningún género de dudas, el requisito para tan alta responsabilidad», dijo el portavoz socialista, Julio Villarrubia, quien recalcó que no recibirá ninguna descalificación ni insultos de su grupo, en contraste con la actitud que el PP mantuvo respecto a su antecesor, Cándido Conde-Pumpido.
El nacionalista vasco Emilio Olabarria afirmó que el candidato reúne «más que sobradamente» los requisitos que se exigen para su puesto, aunque mostró su desacuerdo con la forma de elección establecida para el fiscal general del Estado, ya que la apariencia de independencia e imparcialidad de la institución puede verse debilitada por el hecho de que siga siendo el Ejecutivo el que proponga el nombramiento. Un argumento que reiteraron los portavoces de Izquierda Unida, Gaspar LLamazares; de UPyD, Rosa Díez, y la diputada de CiU, Montserrat Surroca.
Torres-Dulce agradeció al respaldo unánime y destacó que en la última reforma del Estatuto del Ministerio Fiscal ya se dio un paso para reforzar la autonomía de la institución y que es su deseo que esa imagen de neutralidad predomine durante su trayectoria los próximos cuatro años, según Efe.