Gingrich anima las primarias republicanas en Carolina del Sur
Los primeros recuentos dan al expresidente de la Cámara de Representantes el 37% de los votos frente a los 32% de Romney
CORRESPONSAL EN NUEVA YORK Actualizado:El exportavoz del Congreso que hiciese la vida imposible a Bill Clinton en los años 90, Newt Gingrich, ha ganado las primarias de Carolina del Sur, creando la mayor división que se haya visto nunca en el partido conservador. Por primera vez en la historia un candidato diferente ha ganado cada una de las primeras tres contiendas de lo que va a ser "una larga temporada de primarias”, como vaticinó Mitt Romney: Rick Santorum en Iowa, Romney en New Hampshire y Gingrich en Carolina del Sur. Con el recuento casi terminado, Gingrich obtenía esta noche el 40% de los sufragios; Romney, el 27%; Santorum, el 17%; y el ultraliberal Ron Paul, el 13%.
“Esta contienda se está poniendo incluso más interesante”, admitió el que hasta el jueves se veía como el candidato inevitable para enfrentarse a Barack Obama en noviembre. Nunca se había dado un candidato que ganase Iowa y New Hampshire sin llevarse la nominación del Partido Republicano, pero éste es un año de los que hacen historia, no apto para cardiacos. El jueves, dos semanas después de celebrar los caucus, Iowa le arrebató la victoria a Romney y se la atribuyó a Santorum, que anoche quedó tercero a pesar de haber recibido el apoyo de los grupos evangélicos.
Pero lo que realmente arruinó el momento de Romney fue el rechazo a mostrar su declaración de Hacienda, un tema que monopolizó los dos debates de la semana. En esos escenarios Gingrich supo capitalizar la ira general de su partido contra Obama y los medios de comunicación al cargar contra el moderador de la CNN John King por empezar el último debate con una pregunta personal sobre su ex exposa, que acababa de acusarle en ABC de proponerle un “matrimonio abierto” para seguir viendo a su amante. Por personal que resulte, la pregunta no es ajena a la política, ya que Gingrich llevó a votación el impeachment de Clinton tras su affair con Monica Lewinsky.
El exportavoz de la cámara que ha desarrollado mucho colmillo en sus 30 años de política sabe muy bien que la mejor defensa es el ataque, así que no vaciló en cargar contra “la élite mediática que ataca a cualquier republicano para proteger a Barack Obama”.
Éxito en los debates
No fue el único tanto que se apuntó esta semana. En el anterior debate se enfrentó a Juan Williams, un periodista de color que reflejó el malestar de las minorías ante su propuesta de despedir a las limpiadoras de los colegios y sustituirlas por niños pobres. Gigrich no se amedrentó, sino que defendió con rabia su propuesta. Con ello se hizo eco del racismo sureño que ve a los negros como vagos que viven de las ayudas del estado. “La realidad es que Barack Obama ha puesto a más gente en cupones alimenticios que ningún otro presidente de la historia”, argumentó. El dato es real, pero sólo porque durante estos años de crisis se han batido récords de pobreza.
Igual que el factor racial supuso para Obama una cuesta arriba en la batalla por la nominación del partido que duró seis meses, Romney se enfrenta esta vez a la resistencia hacia un presidente mormón. Ni unos ni otros admiten abiertamente que discriminen a un candidato por problemas de raza o religión porque no es políticamente correcto, pero entre los republicanos cualquiera de los que lo niega acaba reconociendo que busca “un buen cristiano para presidente”.
Gingrich es católico y con sus tres matrimonios y numerosos adulterios provocaba rechazo entre los evangélicos, pero desde que ha apelado al concepto cristiano del arrepentimiento muchos sienten la obligación moral de perdonarle. El exportavoz del Congreso necesitará también de sus donanciones, porque la siguiente pelea, que puede ser la del desempate, se celebra en Florida el día 31, uno de los mercados televisivos más caros del país, donde los anuncios de Romney llevan ya un mes al aire.
Gingrich, entre bromas y la familia
En su comparecencia ante los votantes, Gingrich se ha declarado "particularmente feliz de estar acompañado de su familia y su equipo" en esta noche de victoria y bromeó a propósito de la "desinformación" y el acoso de lo que él llama los medios de comunicación "liberales". Por su parte, los tres perdedores hablaron sucesivamente ante sus seguidores para agradecerles el apoyo y anunciarles que seguirán en la carrera.
Romney ha pedido el apoyo de los votantes para continuar "la larga lucha" que se anuncia."Esta contienda se está volviendo más interesante... ya llevamos tres en una larga temporada de primarias. Esta es una dura lucha porque hay mucho por lo qué luchar", dijo Romney en un breve discurso, después de felicitar a Gingrich.
La elección del candidato de cada partido a la presidencia de Estados Unidos se lleva a cabo de manera indirecta: los ciudadanos de cada estado eligen en realidad un número determinado de delegados a la convención nacional que será la que elegirá finalmente al candidato. Para obtener la nominación republicana el candidato tiene que reunir al menos 1.144 delegados.
Carolina del Sur enviará en esta ocasión 25 delegados a la convención nacional republicana que se celebrará en Tampa (Florida) del 27 al 30 de agosto. Tras los caucus de Iowa y las primarias de Nuevo Hampshire, el reparto de delegados quedó de la siguiente manera: Mitt Romney, 31; Jon Paul, 10; Rick Santorum, 8; y Newt Gingrich, 3.Desde 1980, el aspirante que gana las primarias republicanas en Carolina del Sur termina siendo el candidato del partido a la elección presidencial