CON MARGEN DE CONFIANZA

Con la estela aún resplandeciente de la entrada con mal pie de Jesús Gómez y su grupo inversor, la plantilla del Xerez Deportivo vuelve a meterse en su burbuja como ya hizo una semana tras. La competición liguera manda en fin de semana, ya no hay ni comunicados, ni mensajes en Twiter, ni SMS que valga, ahora lo que importa es el balón. El conjunto azulino quiere plasmar la mejoría mostrada el pasado domingo ante el Hércules y viaja a Barcelona para visitar a un Barcelona B irregular y que ha notado esta temporada las excesivas ausencias, tanto en el terreno de juego como en el banquillo. Con el objetivo de lograr por primera vez en lo que llevamos de temporada dos victorias consecutivas, los de Vicente Moreno, que esta semana al fin ya conocieron en primera persona al nuevo propietario de la entidad azulina, aprietan los dientes para meterle mano a los cachorros culés, aunque lo harán con la ausencia de Raúl Cámara, sancionado, y la duda de Jesús Mendoza, con molestias en la espalda. Aún así, el jerezano viaja a tierras catalanas, aunque Moreno no se pillará los dedos y en caso de que el capitán del equipo no esté para jugar, será el canterano Javi Iglesias quien ocupará su posición.

Mendoza o Iglesias

Pese a todo, el técnico valenciano del Xerez no jugará a probar nada en el Mini Estadi y no decidirá hasta última hora si es Mendoza o Iglesias quien salga de inicio. Lo que sí tiene claro el preparador del Xerez es que una semana más será Campano el que ocupe el lateral derecho, por lo que la titularidad se le abra otra vez a Israel como falso extremo. Moreno no descartaba cambiar el sistema (pasar a un 4-4-2 con José Mari en banda izquierda y Capi en la media punta), aunque parece que el valenciano juega al despiste y colocará a los mismos hombres que lograron la victoria ante el Hércules, solo que José Mari volverá a su posición natural de delantero y será Capi el que se posicione como un falso extremo izquierdo. El resto del equipo lo completan Doblas en la meta, Rueda y Cordero en la medular, e Íñigo como acompañante de José Mari en la delantera.

Hipótesis al margen, los azulinos tienen la imperiosa necesidad de puntuar en el Mini Estadi. Tras lograr los tres puntos el domingo pasado los de Moreno están a cinco de los puestos de descenso, aunque ahora se avecinan dos salidas complicadas en territorio catalán (Barcelona B y Sabadell), por lo que no perder es clave para los intereses azulinos, que contarán en el palco con la presencia de Jesús Gómez.

Por su parte, angustiado tras cinco partidos sin conocer la victoria y por la marcha al Salzburgo del goleador Jonathan Soriano, uno de los pilares del equipo, el Barça B examina sus dudas en un Mini Estadi donde sólo ha sido capaz de amarrar diez puntos de treinta posibles. Especialmente sentida es la baja de Soriano, más aún con los problemas del filial para amarrar sus partidos, por lo que el técnico Eusebio Sacristán espera que sea «la hora» de otros jugadores como Rodri, fichaje de este curso, así como de Rafinha Alcántara, quien podría regresar a posiciones más ofensivas. Tampoco podrá contar de nuevo con Jonathan dos Santos ni Sergi Roberto, quienes viajan con el primer equipo a Málaga, así como los lesionados Gustavo, Carmona e Ilie, por lo que podría dar entrada en la lista a algún jugador del juvenil para reforzar al equipo.